El Bilbao Basket dice adiós a Europa

El Bilbao Basket ha llegado a rozar hoy el objetivo de ganar al Estrella Roja por ocho o más puntos de puntos de diferencia que necesitaba para seguir dependiendo de sí mismo, algo que parecía tener en su mano mediado el último cuarto, pero al final perdió hasta el partido (81-85) y ha quedado definitivamente eliminado de la Eurocopa.

En un encuentro en el que casi siempre ha remado contracorriente, ha sido el tremendo acierto en el tiro del conjunto serbio, reflejado en el 11 de 22 con el que acabaron en los triples, el que ha resultado decisivo. Algunos de esos lanzamientos lejanos han llegado en los últimos minutos del choque, cuando la afición de Miribilla se las prometía felices al ponerse los suyos siete puntos arriba (73-66) a poco más de cuatro minutos para el final.

Dos canastas más que complicadas de anotar de Tadija Dragijevic y DeMarcus Nelson, que colocaron el 73-70 en el marcador, fueron claves para frenar la rabiosa reacción local y supusieron el principio de un fin que estuvo amenazando durante los primeros 30 minutos.

El Bilbao Basket echó por la borda un impresionante último cuarto de Roger Grimau, que acumuló 12 de sus 15 puntos en el tramo final del encuentro. Alex Mumbrú, Germán Gabriel y Fran Pilepic habían aguantado antes de un equipo que también contó con Dairis Bertans para ayudar a Grimau en el último cuarto. Pero entre un tercer cuarto poderoso del enorme Boban Marjanovic y el impresionante acierto en los triples de Jaka Blazic y Dragicevic acabaron amargando la tarde a unos hombres de negro que este año se despiden antes de lo que acostumbran de una competición en la que disfrutan, la Eurocup.

Empezó mandando el Estrella Roja, que, después de una canasta inicial de Mumbrú, se adelantó 2-8 y 8-15 gracias a su acierto en los primeros triples lanzados. No se quedó ahí la cosa y los serbios llegaron al final del primer cuarto 8 arriba (17-25) con el esloveno escolta esloveno Blazic como principal protagonista. Mumbrú aguantó en ese arranque.

Cambiaron las cosas en la segunda parte gracias al acierto de Pilepic, que con nueve puntos llevó a su equipo primero a adelantarse en el marcador (29-28) y después a volver equilibrar el choque tras un nuevo intento de escapada visitante (29-33).

Pareció encaminarse hacia la necesaria victoria por al menos nueve puntos de ventaja que necesitaba para seguir dependiendo de sí mismo el Bilbao Basket a vuelta de vestuarios (41-37), pero un severo 0-9 visitante avisó de que el tercer cuarto iba a estar bajo el gigantesco manto de Marjanovic (2,21 de estatura).

Aguantó el tipo como pudo ante el pívot serbio y llegó al último cuarto impulsado con opciones de ganar el partido apoyado en los puntos de Mumbrú y el espíritu de Grimau, que fue el que hizo soñar al Bilbao Arena.

Con la sencilla estrategia de penetrar y penetrar en cada ataque, sobre todo Grimau, pero también Bertans, el Bilbao Basket dio la vuelta al partido y hasta acarició los nueve puntos de ventaja que le servían para seguir dependiendo de sí mismo en la última jornada en Atenas ante el Panionios. Pero entre varios tiros propios errados y un impresionante acierto rival, a los de Rafa Pueyo se le fue de las manos el choque en el carrusel final de tiros libres.