Desahuciada una pareja que no pagaba el alquiler de una finca rústica desde 1949
El matrimonio ocupaba la finca rústica desde 1960 con un contrato firmado 12 años antes
El matrimonio llevaba sin pagar el alquiler desde 1949 y ahora el Tribunal Supremo ha acordado el desahucio de Juan Ll. y Consuelo S. de una finca rústica de Alicante que ocupaban desde 1960 en función de un arrendamiento firmado antes de 1948 mediante un contrato al que no se habían subrogado y que además se incumplió, ya que no se abonaban las rentas.
La sentencia, difundida este viernes, da por probado que el abuelo de la dueña de la casa y el padre del desahuciado, Juan Ll., firmaron un contrato de arrendamiento sobre esta finca rústica, situada en la Partida de la Almajá (Finca El Gurugú o Garrofi) en algún momento anterior al año 1948.
Sin embargo, los últimos recibos conocidos de pago del alquiler son de 1949, mientras que los actuales ocupantes de la finca, que ocupan y en la que ingresaron en 1960, ni se subrogaron a aquel contrato ni pueden demostrar haber pagado nunca la renta, continúa la sentencia.
La dueña de la finca instó al desahucio por el procedimiento de “precario” (uso gratuito de un bien ajeno cuya posesión no nos corresponde aunque nos hallemos en la tenencia del mismo), pero un juzgado de Alicante desestimó su demanda.
Sin embargo, el desahucio fue luego aceptado por la Audiencia Provincial. Los dos ancianos ocupantes de la vivienda acudieron entonces en casación al Supremo, que ahora ordena el desalojo.
“Los demandantes van contra sus propios actos”, dice la sentencia, “pues no habiendo intentado la subrogación ni el pago, pretenden la existencia” de un contrato de alquiler “que nunca existió entre las partes, pues no hubo intento de cobro ni intención de pago”.
Así, la sentencia del Supremo tiene en cuenta que han transcurrido más de sesenta años sin pagar rentas y más de cincuenta sin acto expreso de subrogación.
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