El PSC gana tiempo con Chacón

El Partit dels Socialistes gana tiempo y prorroga su decisión sobre la diputada Carme Chacón, tras anunciar que discrepará de la decisión de los socialistas catalanes de votar en el Congreso a favor de la resolución sobre el derecho a decidir. Chacón ha puesto su escaño a disposición del primer secretario, Pere Navarro, pero la ejecutiva del PSC prefiere abrir “un período de reflexión” antes de decidir qué acciones tomar con la diputada. “El primer secretario se tomará el tiempo que considere oportuno para gestionar este ofrecimiento”, ha dicho el portavoz del PSC, Maurici Lucena, que ha confesado su “serio disgusto” por la decisión de Chacón.

Lucena ha equiparado la desobediencia de Chacón a la que tuvieron los cinco diputados socialistas que no votaron junto a sus compañeros en contra de la declaración soberanista del Parlament. Esos parlamentarios fueron multados por su desobediencia, pero los socialistas no saben si tomarán la misma medida con Chacón: “Normalmente los reglamentos quedan fijados en cada grupo parlamentario. Es una situación insólita”. Lucena ha concretado que es necesaria una “doble reflexión”: en primer lugar, de la propia Chacón; y en segundo, y en función de lo que decida la diputada, de la dirección socialista. El PSC contempla cuatro escenarios: que se siga como si nada hubiera pasado; que Chacón mantenga su escaño pero anuncie que dejará de ser candidata del PSC en las generales; que la diputada intente convencer de su posicionamiento a la ejecutiva del PSC; o la más drástica, que dimita. Lucena ha pedido varias veces tiempo: “Por un tema de cortesía personal y política hay que dar un tiempo para que tenga dos días de serenidad. Debe ver su posición en relación al proyecto del PSC, si han quedado dañadas sus relaciones políticos, y tomar sus conclusiones”. El PSC espera un primer paso de Chacón.

Los socialistas catalanes han intentado rebajar la tensión con el PSOE. Lucena ha recordado las tensiones que el proceso soberanista ha generado en otros partidos, y ha asegurado que el voto diferente del PSC es una “simple discrepancia” que crea un “sabor agridulce” a los socialistas catalanes. De ruptura con el PSOE, ni hablar, ha dicho Lucena: “El deseo del PSC es seguir su relación fraternal e histórica con el PSOE, que tan buenos resultados ha dado”.