Montilla defiende una reforma de la Constitución para diluir el soberanismo

El expresidente de la Generalitat, José Montilla, concretó este jueves en una conferencia en Córdoba la apuesta federalista que en su opinión debería unir a los dos grandes partidos españoles para encontrar un encaje para Cataluña. Montilla considera que el soberanismo sigue siendo un problema para Cataluña más allá de que los resultados de Convergència i Unió no fueran el domingo los que esperaba este partido. En este sentido, el expresidente catalán llamó a buscar una solución federal intermedia que dé una salida a las aspiraciones catalanas sin necesidad de una ruptura.

Montilla defendió siete cambios concretos para que triunfe la España federal. En primer lugar, pidió el “reconocimiento constitucional del carácter plurinacional, plurilingüístico y pluricultural de España” y considera que el reconocimiento de Cataluña como nación “no debería comportar mayores problemas”.

En segundo lugar, pidió clarificar el esquema de atribución de competencias entre el Estado y las autonomías. Montilla dejó claro que debería haber un listado de competencias atribuibles a las comunidades autónomas que estas podrían asumir si lo desean.

Montilla también pidió la adopción de un procedimiento de coordinación horizontal que permita establecer objetivos de colaboración entre las autonomías y el Estado. El objetivo sería garantizar la gestión operativa de las competencias que pueden solaparse. Las comunidades autónomas también deberían participar en las decisiones que tome el Estado en asuntos ante la Unión Europea, defendió el expresidente.

La financiación autonómica también debería adaptarse al nuevo sistema. Montilla abogó por el “federalismo fiscal”, algo que también debería incidir en la capacidad de las autonomías para responsabilizarse de los ingresos. El nuevo sistema se vehicularía con la creación de un consorcio tributario entre las agencias estatal y catalana. El mecanismo de solidaridad interterritorial se debe mantener pero evitando que desincentive el esfuerzo fiscal. También se refirió al concierto vasco, aunque sin citarlo directamente, para decir que el nuevo mecanismo de financiación “tiene que implicar a la totalidad de los territorios de España; es tiempo ya de afirmar esto con prudente y educada claridad”.

Como última medida, Montilla llamó a redefinir las funciones del Senado, cámara a la que, en su opinión, se debería dotar de la competencia de primera lectura de las leyes de carácter estrictamente territorial.