El ‘glamour’, por la ventana

El glamour murió. Ya no está con nosotros. El mito glamouroso de la Moda ha saltado por la ventana. ¡Pumba! Despedazado, desmembrado y con los pespuntes al aire, yace ahí abajo, en el pavimento de la high-street entre el pronto-moda de un Primark y el de un H&M. Un salto fenomenológico.

Que nadie se preocupe. Afortunadamente, nos quedan los héroes. Por suerte para nosotros, los paladines de la Moda siguen intentándolo en el campo de batalla. De la necesidad, virtud. Es el compromiso de ser héroes, ni más ni menos. Bueno sí, el de sobrevivir peleando. O sea, cosiendo. Un panorama, vaya. Y es que el conseguir hacer dos colecciones anuales para poder estar presentes en las pasarelas deja a los 12 trabajos de Hércules en el Peloponeso en un simple ejercicio de precalentamiento. Ante eso, uno agacha humildemente la cabeza. Admirable.

Lo mercantil ganó ayer la batalla a la creatividad

Bueno. Otro día. La situación económica, y sus consecuencias, ha empapado la segunda jornada de la Valencia Fashion Week. Es el signo de los tiempos. Ser osados en lo empresarial y en lo creativo en tiempos de crisis es tarea titánica. Pero, si hubiera que juzgar la moda por esta plúmbea jornada, lo mercantil le habría ganado ampliamente la partida a la creatividad, con alguna excepción (melo)dramática. Y mientras, el personal con cara de póquer. El tiempo arrolla al tiempo y la economía siempre pasa factura.

Abrió Aurelia Gil con su colección para la primavera/verano 2013, donde reventó la imaginería naif de El Mago de Oz. La huerfanita Dorothy Gale se abre un pinterest. Colores intensos mezclados con estampados ingenuos y aniñados. En las prendas la espalda se convierte en la columna del patronaje. Y para la noche se acentúa la pluma. “Totó, me parece que ya no estamos en Kansas”.

Ser osado y creativo en crisis es un trabajo titánico

Encarnis Tomero continúan por la senda ponderada y romántica. Naves en el asfalto se centra en la gasa y el lino como tejidos principales. Vaporosa y leve en prendas como minivestidos. Y lo tiñen todo en azules, rojos y azul eléctrico. Y mucha pluma, mucha pluma. Guillermo del Mar se estrenó en la pasarela y lo hace con un trabajo muy bien resuelto pero un poco confuso en su presentación. Sin sucesión de momentos, no hay emoción.

Juana Martín continúa con su amalgama de referencias. Su baño bebe de tantas fuentes que la colección parece un poco saturada. Las prendas de la colección Sweet Girl de la diseñadora cordobesa se sumergen en las tendencias dominantes con colores suaves y contrastados con flúor.

Poesía y látex. La reinvención de Assaad Awad pasa por dejar de lado los complementos, que le dieron fama mediática, y presentar una colección entregada a los trucos esencia de la casa. Assad nos lleva a un lugar lleno de medusas, cuero, látex fetichista y siluetas dramáticas y excesivas.