Puig pide una investigación de las licencias de TDT

“Aquel proceso que ahora ha anulado el Tribunal Supremo constituyó un ejercicio de sectarismo sin precedentes por parte de la Generalitat”, aseguró ayer el secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig. Y anunció que su grupo en las Cortes Valencianas pedirá una comisión de investigación “para saber cómo fue el proceso de concesión de las TDT y, también, saber la situación actual de las emisoras concesionarias”.

La reacción del líder de los socialistas valencianos a la sentencia que anula el proceso de adjudicación de emisoras de televisión digital terrestre efectuado en 2005, cuando era responsable como consejero Esteban González Pons, se produjo en unas declaraciones durante una visita a un instituto del barrio de Benicalap, en Valencia.

Mientras tanto, el vicepresidente de la Generalitat, José Ciscar, insistió, en la conferencia de prensa posterior al pleno del Consell, en que el Gobierno que preside Alberto Fabra espera un informe de la Abogacía de la Generalitat sobre las repercusiones de la sentencia para buscar “la mejor solución” al asunto “en el menor tiempo posible”.

Desde Esquerra Unida del País Valencià, fue el diputado autonómico Ignacio Blanco quien aseguró que “el Consell creó un No-Do con las TDT durante seis años” y exigió a Ciscar explicaciones sobre la sentencia y a Francisco Camps y Esteban González Pons que pidan “disculpas públicas”.

Reciprocidad de TV-3

Ciscar respondió también, tras el pleno del Consell, a una pregunta sobre la posibilidad de recuperar la recepción de TV-3 en territorio valenciano después de que el PP rechazara en el Congreso de los Diputados esta misma semana la iniciativa legislativa por “una televisión sin fronteras”. El vicepresidente justificó el rechazo por el coste que habría tenido su aplicación, que cifró en unos 15 millones de euros, pero reiteró que eso no influye en la voluntad de Gobierno de Fabra de “buscar una reciprocidad” con Cataluña para las emisiones de los canales autonómicos.

Ciscar puso como condición que se respeten “señas de identidad” como la denominación de la Comunidad Valenciana y justificó que el Gobierno central todavía no haya concedido el múltiple que el PP reclamó desde la oposición insistentemente a Rodríguez Zapatero porque “primero necesitaríamos la voluntad de ese convenio de reciprocidad”.