Gobernación aparta al jefe de sector del incendio

La Consejería de Gobernación ha apartado al jefe de sector de la zona donde se produjo el accidente que costó la vida a dos profesionales de la extinción en el incendio de La Torre de les Maçanes, según aseguran fuentes de los efectivos antiincendios. El jefe de sector es el responsable inmediato de las órdenes dadas en la zona, en este caso, de la orden de crear un cortafuego que tuvo fatales consecuencias. La decisión se ha tomado debido al malestar existente entre bomberos y brigadistas tras el fatal accidente que también dejó dos heridos.

 En los últimos días, bomberos y brigadistas que participaron en la extinción del incendio forestal han cuestionado la actuación del mando avanzado para combatir las llamas que, a su juicio, desencadenó el fatal accidente. “No era ni el lugar ni el momento adecuado para efectuar un contrafuego [técnica usada por los equipos de extinción para combatir las llamas]”, resumía un profesional, en línea con la opinión vertida por otros.

El accidente está siendo investigado. Este periódico intentó ayer sin éxito ampliar información en la Consejería de Gobernación.

Petición a Castellano

Por otro lado, ayer el portavoz de Compromís en temas medioambientales, Juan Ponce, anunció que solicitará una comparecencia del consejero de Gobernación, Serafín Castellano, para que dé explicaciones del incendio forestal de La Torre de les Maçanes, que ha costado la vida a dos profesionales de la lucha contra el fuego y heridas a otros dos.

“Lo que originó la tragedia no fue un relámpago o una deflagración espontánea fruto de las condiciones adversas como aparecía en la prensa días atrás, sino la ejecución de un contrafuego en un sitio inadecuado y en unas condiciones peligrosísimas. Si fue así, los muertos y heridos se podían haber evitado y es preciso depurar responsabilidades”, explicó.

La reclamación de Compromís se produjo un día después de que Gobernación se escudara en la investigación abierta para esclarecer las circunstancias del accidente mortal en La Torre de les Maçanes para evitar pronunciarse sobre las críticas vertidas por brigadistas y bomberos.