Un problema de salud aparta del Ayuntamiento de Vigo a Carmela Silva

La concejala de Urbanismo, Cascos Históricos y Grandes Proyectos de Vigo, Carmela Silva, fue hospitalizada en la madrugada del lunes y se ha visto obligada a dejar temporalmente la actividad política por un problema de salud cuya gravedad, según una nota pública del Ayuntamiento, “está por determinar”. En cualquier caso la edil, que también es teniente de alcalde, tendrá que estar de baja durante un tiempo. Al hilo de esta circunstancia, el alcalde Abel Caballero decidió suspender todos los actos de su agenda oficial, que ayer se centraba en tres reuniones y la asistencia a un acto a última hora de la tarde.

Por su parte, también a través de un comunicado, el grupo municipal del Partido Popular en Vigo deseó a Carmela Silva una pronta recuperación y explicó que, debido a la “delicada situación personal” que atraviesa, ha decidido “dejar en suspenso las críticas políticas hacia la edil de Urbanismo y teniente de alcalde viguesa”.

Por indicación de la familia, la edil ha pedido la “máxima sensibilidad” a los medios de comunicación. El problema de salud de Carmela Silva le sobreviene un día después de que anunciase que renuncia a su escaño en el Congreso de los Diputados tras la polémica surgida por la duplicidad de cargos que mantiene la socialista con la dirección del partido en Galicia. A finales de junio, la Comisión Executiva Nacional Galega del PSdeG había decidido instar a la dirección del partido a abrir un expediente a la concejala viguesa por incumplir la norma de incompatibilidades defendida por el líder, Pachi Vázquez. También los leales a Abel Caballero, bajo el riesgo de quedar apartados en el partido de cara a las próximas elecciones autonómicas, presionaron a Silva. Este pasado fin de semana, y ante la negativa de dejarle opciones para compatibilizar sus responsabilidades, la edil viguesa decidió renunciar. El debate sobre la apertura del expediente era uno de los puntos que hoy iba a abordar la Ejecutiva de los socialistas gallegos.

Silva siempre ha defendido que no hay duplicidades y que solo percibía un único salario por sus dos responsabilidades. También había denunciado una “persecución” del secretario general gallego, al que acusó de haber hecho gala de “un abuso intolerable de poder”.