Barcelona, capital europea de la Harley

Fue en la hermosa epopeya de la Norteamérica profunda de las carreteras infinitas llamada Easy Rider donde el personaje de George Hanson, caracterizado por un impecable Jack Nicholson, pronunció aquello de “nunca oses decirle a nadie que no es libre porque entonces éste te hablará y te hablará con tal de convencerte de que lo es”. Para los organizadores del Harley Days, que arranca este viernes en la Fira de Barcelona, el concepto libertad va montada (casi tumbada) sobre las dos ruedas de una Harley Davidson.

En su cuarta edición, los organizadores de la concentración más importante de Europa dedicada a estas veneradas obras de ingeniería nacidas en Wisconsin esperan reunir más de 21.000 motos y superar el millón de visitantes entre el viernes, sábado y domingo en el recinto ferial de Montjuïc. "La moto es libertad y la Harley es el máximo exponente de ello. Con ella, cada uno es rebelde y se expresa a si mismo como individuo", indica Josep Grañó, Director General de Harley-Davidson España y Portugal.

Los barbudos aficionados de gafas de sol Aviator, cadenas de plata y toda la parafernarlia de motero que a uno pueda ocurrírsele podrán sumergirse en un universo de gasolina y cuero adaptado al nivel de exigencia que dicte su espíritu de libertad. Habrá una carpa dedicada a la Sportster Seventy-Two, uno de los últimos lanzamientos de la marca, con una estética calcada a las de las motos californianas de la década de 1970. Exposición de depósitos customizados, pruebas gratuitas de motos o simuladores de fotografía con el sugerente título Me on a Harley (Yo en una Harley) completan el catálogo de actividades. "Cualquiera podrá sentir la sensación de arrancar y montar en una Harley", comenta Grañó, en referencia al decorado en el que, montada sobre unos rodillos, se emplazará una motocicleta para que los asistentes puedan montarla, aunque sin desplazarse ni un milímetro.

El Elvis Day destaca entre las novedades de esta edición. Una jornada en la que se rendirá homenaje a otro de esos elementos que orbitan en torno a la ecuación de libertad, sueños y motociclismo, que Grañó denomina "mundo Harley", esta vez en clave de rock. Consistirá en la actuación de las ocho mejores bandas imitadoras de Elvis Presley y la exposición de fotografías del artista de Memphis con su Harley así como de réplicas de algunos de sus trajes de concierto. También habrá un Cadillac rosa.

El domingo tendrá lugar el Desfile de Banderas, en el que se espera que cerca de 10.000 aficionados recorran el asfalto de Barcelona para lucir sus motocicletas. En opinión de Grañó, el evento “ya se ha consolidado en la agenda internacional de los propietarios de Harley-Davidson como uno de los más importantes del mundo debido a la extraordinaria identidad de los valores de la marca Barcelona con la marca Harley-Davidson”. Este fin de semana, todo aquel que se acerque a la Fira de Barcelona tendrá la libertad de comprobarlo.