El PP medita abstenerse en la votación

Alicia Sánchez-Camacho, presidenta del Partido Popular (PP) de Cataluña, sopesa abstenerse en la votación de la propuesta del pacto fiscal que se debata en el pleno del Parlament para evitar un "choque de trenes". La popular ha afirmado que aunque no comulgue con el modelo fiscal auspiciado por Convergència prefiere la vía más conciliadora de la abstención para facilitar la negociación Generalitat-Gobierno. "El PP está valorando su abstención como actitud más responsable. Somos el partido del Gobierno español, con el que [Artur] Mas tendrá que negociar la propuesta catalana de pacto fiscal", ha explicado la líder popular.

La estrategia de los populares es evitar una confrontación y no repetir el escenario de 2005 cuando su rechazo rotundo al Estatuto les aisló de la vida política catalana. Sánchez-Camacho quiere así jugar su mejor baza: erigirse como la garante del éxito de una eventual mejora del modelo de financiación en su condición de partido de Gobierno y de puente con La Moncloa. Los populares han subrayado que su eventual abstención no es un gesto gratuito y que el Gobierno de Mariano Rajoy es consciente de la importancia del asunto. Miembros del PP de Cataluña y del Ministerio de Hacienda están estudiando los mecanismos para reformar el actual modelo, vigente hasta 2013, aunque siempre dentro de la LOFCA.

Es la actitud más responsable como partido de Gobierno", dice la líder popular

El esquema de financiación que plantea el PP aspira a retocarlo para que sea más "justo" y "equilibrado" para Cataluña y que incluya la ordinalidad y con solidaridad finalista con el resto de comunidades autónomas. "Iremos con una actitud dialogante y constructiva", ha asegurado Sánchez-Camacho, que ha dibujado dos posibles escenarios en la cumbre prevista para este miércoles: uno de "entendimiento" si el Ejecutivo se apresta a negociar con el resto de partidos o de "adhesión" si sólo aspira a recabar apoyos a su modelo. Pero, de entrada, el PP ya ha reprochado al Gobierno de Artur Mas que no haya facilitado a los partidos el "orden del día" de la reunión y que desconoce si el punto de partida será el documento aprobado en la comisión parlamentaria que contó con el respaldo de CiU, ERC e ICV-EUiA.

Los populares confían en que se imponga la vía del consenso porque el "choque de trenes", según Sánchez-Camacho, perjudicaría a España de cara a la confianza de los mercados financieros y de la Unión Europea. El PP exigirá que el modelo fiscal no vaya acompañado de un "nuevo incremento de impuestos" y que, por tanto, la propuesta catalana incluya un compromiso de limitar la presión fiscal de los catalanes a un máximo que sea la media del conjunto de España.