ERC avisa a Mas que no aceptará rebajas en el pacto fiscal para incluir al PSC

Esquerra Republicana no quiere que el consenso mayoritario que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, busca para el pacto fiscal se convierta en una excusa para aguar la protesta. Así lo ha avisado esta mañana el líder republicano, Oriol Junqueras, en una conferencia pronunciada en el Fórum Europa-Tribuna Cataluña. ERC tendió la mano desde el principio a CiU para reclamar conjuntamente en Madrid el pacto fiscal, un consenso al que enseguida se sumó Iniciativa. Pero el deseo de Mas de incluir al Partit dels Socialistes, e incluso al PP, inquieta a Junqueras. Si en aras del consenso Convergència i Unió rebaja su propuesta de pacto fiscal análoga al pacto fiscal, ha avisado el republicano, "Esquerra se autoexcluirá". 

Mas y Junqueras trataron de esta cuestión en la reunión que ambos mantuvieron para hablar de financiación, la primera de la ronda de contactos que está llevando a cabo Mas y que acabará en una cumbre por todos los partidos. En ese encuentro, el presidente arrancó del líder republicano el compromiso de ayudar a incorporar al PSC al pacto fiscal. Aunque Junqueras ha visto como este papel se lo ha adjudicado el líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, que se reunirá con el primer secretario del PSC para acercar a los socialistas al pacto fiscal. ERC teme que de esa reunión salga una propuesta de modelo rebajada y alejada del concierto económico. "Si lo que buscan ahora es un acuerdo con el PSC y otros más", que suponga alejarse de las conclusiones de la comisión parlamentaria del concierto, aclaró Junqueras, ERC "no lo aceptará".

"El Gobierno podrá contar con nosotros si lo que quiere es, con o sin el PSC, que Cataluña salga del agujero en el que está, pero si lo que desea es decorarlo con la esperanza de que algún día el Gobierno español nos traiga una escalera, entonces no nos encontrarán", añadió Junqueras. Sin ambages, concretó que ERC se opondrá a cualquier pacto fiscal que suponga "confiar en España".  El modelo que persiguen los republicanos es análogo al concierto: que Cataluña tenga una hacienda propia que le permita recaudar, gestionar e inspeccionar todos los impuestos pagados por los catalanes. "Todo sistema que obligue a depender de la voluntad de los Gobiernos españoles no merece ser aprobado", concluyó Junqueras.