Justicia garantiza que llegará “hasta el final” de los casos de bebés robados
El Ejecutivo se reúne con representantes de las asociaciones
La consejera de Justicia, Idoia Mendia, reconoció ayer que uno de los principales problemas con los que se están encontrando a la hora de encarar las investigaciones y los trámites para esclarecer presuntos casos de bebés robados es “el paso del tiempo”. Mendia aseguró que la intención de la Fiscalía y los jueces vascos es “llegar hasta el final”, “a diferencia de lo que ocurre en otras comunidades autónomas”, en las que se está abogando por archivar las denuncias. En Euskadi solo hay 30 casos archivados sobre un total de 223 denuncias presentadas.
Mendia realizó estas declaraciones al término de una cita entre los departamentos de Justicia, Sanidad e Interior —que componen la comisión interdepartamental creada para trabajar de forma conjunta en los casos de bebés robados— y las dos asociaciones que atienden a las familias afectadas. Los representantes oficiales explicaron sus actuaciones para tratar de colaborar en el esclarecimiento de estos casos y agilizarlos.
Fernando Sotillo, abogado de la asociación Anadir, aseguró que están “sorprendidos y agradecidos" con el paso dado por el Ejecutivo. "Es una iniciativa perfecta”, añadió.
Mendia asume que hay “lagunas” de datos en registros de Gipuzkoa
Las asociaciones mostraron sus dificultades para atender a las numerosas familias que acuden a ellas para informarse. Mendia explicó las limitaciones a la hora de facilitar espacios de encuentro —competencia de Ayuntamientos y Diputaciones— y de ofrecer financiación porque la normativa de subvenciones resulta “bastante estricta”. Pero recordó que el Gobierno ha estado desde el “minuto cero” a disposición de las familias con facilidades como el servicio de atención a la víctima, con atención psicológica y orientación jurídica en cuatro partidos judiciales. La consejera apuntó a que en algunos casos hay “lagunas” de información, ya que los registros civiles de Gipuzkoa fueron dañados por inundaciones y por los atentados de ETA que sufrieron algunos juzgados.
Durante la concentración de ayer en Vitoria que cerró una jornada de citas en torno a los casos de bebés robados, una de las portavoces, Flor Díaz, explicó que las tres exhumaciones realizadas en Euskadi —dos en Gipuzkoa y una en Bizkaia; en todas el féretro estaba vacío— han generado “una especie de psicosis” entre las familias. Ello podría abrir la puerta a nuevas denuncias. Díaz llamó la atención al Gobierno sobre el gran número de demandas que están recibiendo y su falta de recursos. SOS Bebés Robados también se reunió a mediodía de ayer con la presidenta del Parlamento, Arantza Quiroga.
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