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El Kursaal consolida su actividad de congresos, pese a caer la facturación

El auditorio donostiarra ingresa 4,2 millones, un 4,4% menos que un año antes

Mikel Ormazabal
Donostia-San Sebastián -
La diputada de Cultura Ikerne Badiola, el alcalde donostiarra, Juan Karlos Izagirre, y el gerente del Kursaal, Iker Goikoetxea, ayer en el auditorio donostiarra.
La diputada de Cultura Ikerne Badiola, el alcalde donostiarra, Juan Karlos Izagirre, y el gerente del Kursaal, Iker Goikoetxea, ayer en el auditorio donostiarra.JAVIER HERNÁNDEZ

El Kursaal donostiarra logró revalidar en 2011 su potencial como sede de grandes congresos internacionales, una actividad que le ha permitido amortiguar los efectos de la crisis económica y cerrar el pasado ejercicio con una facturación de 4,2 millones de euros. Esta cifra es un 4,4% inferior a la de 2010, aunque supera en un 7,9% la prevista en los objetivos, según informó ayer el director gerente del centro, Iker Goikoetxea. En una “difícil coyuntura”, el Kursaal consiguió acumular un nuevo superávit de tesorería, esta vez de 825.865 euros, que le permite autofinanciarse desde su inauguración en 1999.

El aumento del tamaño de los congresos, con una cantidad media de 619 asistentes, posibilitó compensar el descenso de eventos de este tipo celebrados en 2011, hasta un total de 23 frente a los 30 registrados un año antes. Esta actividad supuso casi un tercio de la facturación total.

En una presentación a la que acudieron el alcalde donostiarra, Juan Karlos Izagirre, y la diputada de Cultura, Ikerne Badiola, Goikoetxea destacó eventos como la Conferencia Internacional de Aceleradores de Partículas (1.200 científicos), el congreso de la Sociedad Europea de Psicología Cognitiva (1.000 delegados) y la quinta Conferencia del Programa Marco de I+D de la UE (700 asistentes).

El Kursaal generó en 2011 un impacto económico en el territorio guipuzcoano de 53 millones, dos millones inferior al dato que se dio para el ejercicio anterior. Pese al descenso de la facturación, de la cifra de congresos y de la repercusión en el PIB, Goikoetxea calificó el año de “excepcional en lo congresual” y “positivo” el balance económico. El centro diseñado por Moneo, en cambio, logró aumentar el grado de ocupación de sus instalaciones hasta situarse en el 79%, un punto porcentual por encima del ejercicio anterior.

Las instituciones no prevén una ampliación a corto plazo

Los responsables del auditorio resaltaron la nota de 8,6 sobre 10 que los clientes dieron al evaluar su grado de satisfacción con las instalaciones.

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Respecto a la actividad cultural, las programaciones de la Fundación Kursaal, del Jazzaldia, la Quincena Musical y el Festival de Cine, la temporada de abono de la Orquesta de Euskadi y los actos de los promotores privados ocuparon el auditorio y la sala de cámara con 343.243 espectadores, un 3,8% menos que en 2010. El resto de reuniones y ferias atrajeron a 122.594 personas, un 11,5% menos.

De cara a 2012, Goikoetxea expresó su confianza en que será “un año razonablemente bueno, dentro de la prudencia que el contexto demanda”, y adelantó que de los seis congresos internacionales que ya tienen confirmados, todos ellos están relacionados con la ciencia y la tecnología. Dos de estos, la IV Neurobiology of Language Conference y la 15 TCI Annual Global Conferencie, congregarán a más de 600 profesionales.

El gerente restó importancia al hecho de haber perdido como cliente al festival publicitario El Sol, una de las citas fijas del Kursaal que este año se celebrará en Bilbao. Su vacío se cubrirá, dijo, con “otros congresos”.

A preguntas de los periodistas, Badiola abordó el proyecto de ampliación del Kursaal, que la Diputación guipuzcoana y el consistorio donostiarra mantienen aparcado por falta de recursos económicos. La diputada de Cultura afirmó que en este asunto “hay que ser muy prudentes de momento”. La creación de un nuevo espacio congresual en el subsuelo “está encima de la mesa y no se descarta”, aunque Badiola matizó que no se materializará “a corto plazo”. El alcalde Izagirre, por su parte, subrayó que el Kursaal es “un motor clave y necesario” para San Sebastián y su economía y en el futuro también “será eje esencial para el desarrollo” de la ciudad, por lo que “seguirá recibiendo el impulso y la ayuda” municipal.

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Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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