Joan Ignasi Elena, el ‘outsider’ obiolista

Joan Ignasi Elena (Barcelona, 1968), fue el primer candidato en salir a la palestra para postularse como primer secretario del Partit dels Socialistes (PSC). Como en toda carrera de fondo, sin embargo, la liebre solo sirve para impulsar a los favoritos. Con la candidatura de Pere Navarro, alcalde de Terrassa, con una velocidad de crucero imparable para alzarse con la primera secretaría, Elena se ha quedado como un ‘outsider’ al que apoya el movimiento Nou Cicle, el pequeño pero combativo grupo heredero del exprimer secretario Raimon Obiols.

Elena no se conforma con haber dado el pistoletazo de salida a las candidaturas, cuando en febrero Nou Cicle se plantó ante la dirección y lo postuló como candidato. El entonces alcalde de Vilanova i la Geltrú (Garraf), sin embargo, falló a la primera: perdió la alcaldía, que ha pasado a manos de Convergència i Unió. El PSC buscaba un alcalde que lo gobernara, y frente a las victorias de sus rivales, Pere Navarro en Terrassa y Àngel Ros en Lleida, Elena no pudo sacar pecho en Vilanova i la Geltrú.

Elena, abogado especializado en derecho laboral y derechos de autor, siempre ha estado presente en la esfera socialista. Llega al partido en 1983, y en 1991 se alza con la primera secretaría de las juventudes del partido, cargo que ocupa hasta 1993. La plataforma le permite llegar a diputado en el Parlament, donde está una legislatura, hasta el 1996. En 1999 acompaña a Sixte Moral en el Gobierno de Vilanova i la Geltrú, y en el 2000 entra en la Ejecutiva socialista como representante de Nou Cicle. Su trayectoria política da un salto en 2005 cuando sucede a Sixte Moral en la alcaldía de Vilanova i la Geltrú a media legislatura. Logra revalidar el cargo en las elecciones de 2007. En sus seis años de mandato se dedicó a continuar la obra de Moral, que combinó un impulso a la transformación urbana de la ciudad y grandes obras como el centro tecnológico Neápolis.

El candidato menos oficialista es también el que propugna una renovación más profunda. Una triple renovación que sea “ideológica, organizativa, y de personas”. Defensor del discurso catalanista, cree que el PSC debe tener grupo propio en el Congreso y mantiene que los socialistas deben conformar un “conglomerado catalanista” para recuperar la Generalitat en 2014.

Elena tiene las de perder en el Congreso pero afronta con calma y optimismo la cita socialista. Confesado hedonista, sus tres hijas proceden de la India, país que ha visitado con frecuencia. Elena es amante de la buena cocina, de la tranquilidad de una reposada sobremesa, y de los largos paseos por Vilanova i la Geltrú. Esa personalidad relajada también se deja ver en sus gustos musicales, que combinan cantautores como Joan Manuel Serrat i Lluís Llach y la música barroca.

Con la tranquilidad y el buen humor con el que vive la vida ha afrontado la candidatura para liderar el PSC. Firmeza para expresar sus ideas y calma ante la pérdida progresiva de apoyos. El ‘outsider’ quiere dejar de serlo y crear un nuevo aparato más abierto en el PSC, aunque las opciones de Nou Cicle son escasas.