Un país de brocha gorda
Italia adora esa eternidad del muro bien pintado que oculta una humedad solo hasta que se le aplique la próxima capa y eso tiene su claro reflejo en la política, en la que siempre se regresa a lo mismo de antes
Italia adora esa eternidad del muro bien pintado que oculta una humedad solo hasta que se le aplique la próxima capa y eso tiene su claro reflejo en la política, en la que siempre se regresa a lo mismo de antes