Colombia da el primer paso para combatir el acoso sexual en internet
La Corte Constitucional exhorta al Congreso a legislar sobre la materia después de que una mujer denunciara haber sido grabada en un baño público
La senadora Clara López nunca había tenido que enfrentarse a la violencia de género que se vive en internet hasta el pasado viernes. Durante una audiencia pública en la que se conmemoraba el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, unos hombres, todavía no identificados, hackearon la transmisión de la sesión virtual del Congreso de la República. Mientras intervenía la senadora por el Pacto Histórico María José Pizarro, en la pantalla se filtró un video pornográfico en el que se podía ver a un hombre masturbándose. “A esto nos vemos sometidas las mujeres: violencia física, sexual y psicológica”, afirmó en redes Pizarro al denunciar los hechos.
La Comisión de la Mujer ha emitido un comunicado en el que rechaza el hecho y señala al hacker, que aparecía en la sesión de zoom con el nombre de Michael Johnson, como un abusador. También ha anunciado medidas legales. El hecho no dejó de tener cierta carga simbólica. Durante esta misma audiencia, López había presentado el resumen de un proyecto de ley que busca precisamente erradicar la violencia de género digital en Colombia que será presentado este martes. Tras el episodio, el problema ha tomado aún más relevancia y no faltan voces que subrayan la importancia que tiene la defensa de los derechos de las mujeres en todos los ámbitos, también en internet.
🔴 Denuncia 🔴
— María José Pizarro Rodríguez (@PizarroMariaJo) November 25, 2022
Hoy en medio de la audiencia de @ComisionMujerCo por el #25N, la plataforma fue hackeada para mostrar hombres masturbándose. A esto nos vemos sometidas las mujeres: violencia física, sexual, psicológica; al acoso.
Anunciamos denuncia penal #EmergenciaDeGenéro pic.twitter.com/BoW3TKzqML
López, que lidera el proyecto, explica que el texto busca, además de penalizar, reparar a las mujeres y concienciar a la población sobre este delito. “Este proyecto contó con la ayuda de ocho organizaciones, entre las que se encuentran Artemisas, la Defensoría del Pueblo y ONU Mujeres. De aprobarse, quienes cometan delitos digitales podrían enfrentarse a penas de cárcel de 80 a 100 meses”, asegura López.
En Colombia, en 2021 se recibieron 62 denuncias por casos de extorsión sexual, 325 por ciberacoso, 676 por injuria o calumnia a través de redes sociales y 972 denuncias por amenaza a través de redes sociales, según el Centro Cibernético Policial. Sin embargo, señalan estas mismas fuentes, la cifra podría llegar a ser mayor dado el número de casos que permanecen sin denunciar.
Hoy por hoy, este tipo de violencias contra la mujer en internet no están tipificadas como delito y han crecido en incidencia en los últimos años. Organizaciones como la OEA y ONU Mujeres han hecho recomendaciones sobre la necesidad de penalizarlas e incorporar un nuevo delito de distribución de material íntimo o sexual sin consentimiento en el código penal colombiano como el que propone el proyecto de ley.
“En América Latina, países como Argentina, Chile, Perú y México, entre otros, ya han legislado sobre este tema y ahora es momento que Colombia garantice a sus mujeres una vida libre de violencia de género digital”, asegura la senadora del Pacto Histórico, que ha dedicado su vida a luchar por los derechos de las mujeres.
En octubre de este año, la Corte Constitucional exhortó al Congreso a legislar sobre la materia después de que los magistrados de la corte estudiaran el caso de una mujer que fue grabada sin su consentimiento en el baño de una escuela de equitación. La Corte señaló por primera vez que la violencia digital de género es una forma grave de violencia que ocurre con la asistencia del uso de las nuevas tecnologías, o agravado por este, y que afecta gravemente a las mujeres.
La mujer denunció que entró a los baños y no se dio cuenta de nada. Sin embargo, un año más tarde, descubrió que había sido grabada y que el video se estaba difundiendo a través de WhatsApp porque este había llegado a unos de sus vecinos. La Corte ha señalado que en la grabación quedan expuestas las zonas genitales de la demandante, quien supo de dónde era el video porque en la grabación se ve el logo institucional de la escuela. “La cámara fue colocada de forma estratégica con estos fines”, señala la sentencia.
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