España se compromete ante el Gobierno de Trump a elevar el gasto militar

En su primera reunión bilateral con la Administración de Donald Trump, el Gobierno de Mariano Rajoy reiteró su compromiso de elevar el gasto en defensa, que se ha convertido en la mayor reclamación del nuevo presidente estadounidense a sus aliados. “Nos sentimos confortables en el número del 2% en una década y en la forma de conseguirlo”, dijo este jueves en Washington la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, tras reunirse con su homólogo estadounidense, James Mattis.

Los países de la OTAN acordaron en 2014 elevar en una década el presupuesto en defensa al 2% del PIB nacional. Como candidato electoral y presidente, Trump se ha quejado de que los socios de la Alianza Atlántica no aportan lo suficiente. En su conversación telefónica con Rajoy en febrero, el republicano, que quiere reforzar el músculo bélico de EE UU, le manifestó la “importancia de que todos los aliados de la OTAN compartan la carga de los gastos de defensa”.

España es el tercer país de la OTAN que menos porcentaje del PIB dedica a defensa (el 0,9%), solo por delante de Bélgica y Luxemburgo. Solo cinco de los 28 miembros de la Alianza cumplen el objetivo. La Moncloa apuesta por elevar gradualmente la carga hasta el 2% para cumplir con las metas de reducción del déficit público adoptadas con Bruselas.

Cospedal descartó llegar a ese porcentaje antes de 2024 y dijo que tampoco se lo pidió Mattis. El general retirado de los Marines lanzó una advertencia en febrero en su primera cita con los miembros de la OTAN, a la que acudió la ministra española: “Si sus países no quieren ver a Estados Unidos reducir su nivel de compromiso con la Alianza, cada una de sus capitales debería mostrar apoyo a nuestra defensa común”, dijo Mattis en Bruselas.

Tras su reunión en el Pentágono, la ministra mandó ante la prensa un mensaje a la opinión pública española para defender ese incremento del gasto militar: “Si no tenemos garantizada nuestra defensa y nuestra seguridad da igual tener garantizado el subsidio de desempleo o la sanidad pública o la mejor educación porque lo primero que necesita un país es seguridad”.

Al margen del aumento previsto, Cospedal ensalzó el actual “compromiso en términos cualitativos”, por ejemplo en la contribución a misiones internacionales. Una idea que respaldó Mattis al inicio del encuentro cuando elogió el “liderazgo” español en despliegues militares en Irak, Líbano, Letonia y África.

Lucha contra el ISIS

Por otra parte, Cospedal descartó por ahora aumentar la contribución militar española a la campaña contra el Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) en Irak. “Hoy no hay previsto un incremento de tropas”, afirmó.

La ministra recordó que España ha elevado recientemente a 425 el número de tropas con funciones de entrenamiento en Irak, dijo que no recibió ninguna petición del jefe del Pentágono de aumento de efectivos y señaló que cualquier decisión en ese sentido “se iría viendo poco a poco”.

La expresidenta de Castilla La Mancha también descartó cualquier papel militar español en Siria, donde EE UU y Francia cuenta con soldados de élite que colaboran con las milicias que combaten al ISIS. “En Siria, España hoy por hoy no tiene previsto entrar directamente en el país”, dijo y destacó el apoyo prestado a los países de los alrededores.

Sin embargo, el día anterior, el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, que acudió a una reunión en Washington de la coalición de países contra el ISIS, abogó por “fortalecer y aumentar” la participación española “en la estabilización de Irak y Siria”.