Los duques de Palma ponen a la venta su palacete de Barcelona por 9,8 millones
Una web difunde las características del inmueble, adquirido en 2004 por 5,8 millones
Los Duques de Palma han puesto a la venta el palacete que adquirieron en 2004 en el exclusivo barrio barcelonés de Pedralbes. Y lo venden por 9,8 millones de euros, una cuantía algo superior al precio que pagaron por su compra en 2004 (por 5,8 millones de euros) y por las reformas que efectuaron en los dos años siguientes, por las que pagaron 2,85 millones de euros a través de la sociedad Aizóon. Si el comprador definitivo de la finca asume el precio reclamado, la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín, imputado en el caso Nóos, obtendrían unas plusvalías cercanas al millón de euros.
Un gran surtido de fotografías de la casa, con 1.001 metros cuadrados contruidos sobre una finca de 2.200 metros, aparece en la página de internet de Barcelona.Rent, dirigida a potenciales compradores rusos. La web, además de una amplia descripción de la casa de tres plantas con piscina y jardín, asegura que el palacete se encuentra “situado en una zona tranquila y exclusiva de Barcelona –Pedralbes- en una colina con una vista panorámica de toda la ciudad” y asegura que “es una zona muy aislada, que permite la máxima confidencialidad en circunstancias excepcionales”.
El anuncio de venta del inmueble situado en la avenida Pearson de Barcelona aparece apenas unos días después de que trascendiera de que el Rey prestó 1,2 millones de euros a la infanta Cristina para que la pareja pudiera asumir la compra de la casa. De ese dinero, Don Juan Carlos solo habría recuperado 150.000 euros.
Según la descripción de BarcelonaRent, el palacete cuenta con siete dormitorios y diez baños, una piscina y un aparcamiento para tres plazas ampliable. Asimismo, cada una de las tres plantas tiene una sala de estar de 120 metros cuadrados.
La venta del inmueble coincide con la marcha de Cristina de Borbón y sus cuatro hijos a Suiza, donde ella continuará trabajando para la Obra Social de La Caixa. Iñaki Urdangarín, por su parte, continuará residiendo en Barcelona, donde seguirá la instrucción del caso Nóos, en la que está imputado por tres supuestos delitos fiscales.
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