El City prende fuego a Old Trafford

Los bomberos tuvieron que apagar el sábado de madrugada en casa de Mario Balotelli un incendio de serias proporciones que había empezado cuando el astro italiano y cuatro amigos lanzaban cohetes desde la ventana del cuarto de baño. Ayer, Balotelli prendió fuego al mismísimo Old Trafford, el teatro de los sueños del Manchester United, con dos goles que abrieron el camino para una histórica victoria del Manchester City en el derbi: 1-6.

Hay resultados que hacen algo más que historia. Marcan un cambio de época. Eso es lo que ocurrió ayer en Old Trafford. En el primer derbi de Manchester en mucho tiempo con dos candidatos al título, el City machacó a sus odiados rivales y los dejó a cinco puntos de distancia. Pero hizo mucho más que eso: se convirtió en el favorito de la carrera por el título. Despreciados como nuevos ricos, ayer se convirtieron en un equipo de fútbol. Hasta ahora eran un equipo de estrellas. Algunas rutilantes (Silva, Agüero), otras discutidas (Balotelli), prometedoras (Nasri), valores seguros (Touré Yayá), volátiles (Adebayor), sobrevaloradas (Barry, Milner) o en el limbo (Tévez). Ahora, además, Roberto Mancini tiene un equipo.

Hay resultados que hacen más que historia. Marcan un cambio de época

Considerado un peso pluma cuando llegó, Mancini ha salido reforzado de su enfrentamiento personal con Tévez después de que este se negara a salir de sustituto en el campo del Bayern de Múnich en una de las peores noches del City este año. Aunque el club parece tentado a ser con Tévez más benigno de lo que Mancini quería, su figura se ha agigantado desde ayer. Lo que ha pasado en Old Trafford no es como cuando el Barcelona golea en el Bernabéu, es como si lo hubiera hecho el Atlético. Es la peor derrota en casa del United desde que precisamente el City ganara 0-5 hace 56 años y la primera vez que encaja seis goles en casa desde hace 80 años.

"Es el peor resultado de mi carrera. Ni siquiera como jugador creo haber perdido por 1-6", reconoció Alex Ferguson. El cascarrabias escocés ni siquiera se refugió en el atenuante de que su equipo jugó con 10 casi toda la segunda parte: el United ya estaba uno a cero abajo cuando Evans vio la roja por agarrar a Balotelli cuando este se escapaba, solo, en la frontal del área.

Balotelli había abierto el marcador a los 22 minutos con un disparo raso que había salido de la nada y que se coló junto a la cepa del poste a la izquierda de De Gea. Ya con superioridad numérica, el City trinchó al United. En el minuto 60, un pase magistral de Silva a Milner permitió al inglés cruzar la pelota maravillosamente para que el italiano marcara el segundo a bocajarro. El Kun puso el tercero nueve minutos después de forma parecida.

El gol de Fletcher para el United en el minuto 81 acabaría haciendo la derrota aún más dolorosa: hizo renacer en la hinchada la esperanza de una de esas típicas remontadas del United, como la que el año pasado le permitió dar la vuelta al partido en el último suspiro. Al contrario, tres contraataques mortales ya en los minutos finales permitieron al City convertir una victoria en un momento histórico con un gol de Silva y dos de Dzeko.

El Chelsea desperdició una oportunidad de oro para colocarse segundo al perder (1-0) en campo del recién ascendido y casi vecino Queens Park Rangers, que marcó de penalti en el minuto 10. Con nueve hombres por las expulsiones en la primera parte de Bosingwa y Drogba, los otros nuevos ricos de la Premier perdieron primero los papeles y luego el partido. El Arsenal sigue poco a poco su remontada tras ganar con dos goles tardíos al Stoke City (3-1). Y el Liverpool se sigue desinflando: el sábado empató en Anfield con otro recién ascendido, el Norwich (1-1).