Los diarios de navegación triunfan en Internet por la frescura de sus contenidos
Los 'weblogs' son listas de enlaces, comentados por una o varias personas, en cuyo criterio confía la audiencia y que actúan como filtro del 'ruido' de Internet. También hay diarios personales
Los weblogs, bitácoras o diarios de navegación, donde uno o más autores publican regularmente sus reflexiones, con enlaces a noticias u otras webs, están viviendo actualmente una explosión. Desde diarios muy personales hasta noticieros colectivos como BarraPunto, con más de 10.000 visitas al día, la facilidad de uso de los programas, la frescura de los contenidos y el poder de la comunidad explican su éxito.
'¡Mirad qué he encontrado!'. Éste podría ser el inicio de un weblog, término acuñado por Jorn Barger en 1997. Sus antecedentes son las antiguas páginas 'What's New', que registraban las novedades en un servidor web.
El weblog básico es una lista cronológica de enlaces sobre un tema, comentados por una o varias personas, en cuyo criterio confía la audiencia y que actúan como filtro del 'ruido' de la red. Su popularización llegó con el verano de 1999, cuando salieron las herramientas que permitían gestionarlos fácilmente.
Tecnología y política digital
Slashdot es su estandarte, un weblog colaborativo que empezó como la página personal de Rob Malda y Jeff Bates, centrado en la tecnología y la política digital.
La forma de organizarse y los programas libres con qué funciona han sido punto de arranque para muchas experiencias parecidas, como el español BarraPunto, nacido en junio de 1999, y actualmentye con más de 5.000 usuarios registrados. Cualquiera puede enviar su artículo, que revisará uno de los 20 editores. Cuando sea publicado, los lectores enviarán sus comentarios, que el moderador clasificará según su interés.
También en 1999 nacía el weblog de Bulma (Bisoños Usuarios de Linux de Mallorca y Alrededores), con un crecimiento del 3.000% este año y una 3.200 visitas diarias.
Bulma es una asociación de promoción de programas libres, que usa y ofrece el weblog para 'poner artículos que sean de ayuda, básicamente técnicos, y enlaces o noticias interesantes', explica Ricardo Galli, quien recuerda aún cuando fueron 'slashdotteados' (referido al bombardeo que reciben los sitios que aparecen mencionados en Slashdot): un artículo de Bulma se comentó allí y, en pocas horas, recibía nada más y nada menos que 30.000 visitas.
El año de los personales
Éste ha sido también el año de los weblogs personales, más numerosos pero con menos visitas, 50 al día para Jorge Otero, cantante del grupo musical The Stormy Mondays.
En julio pasado, la banda estuvo de gira por Italia y, con un ordenador de bolsillo que incorporaba cámara digital y teléfono móvil, actualizaban su weblog. 'Desde la carretera, hoteles, camerinos... Era la gracia: escribir y subir fotos en cualquier momento y lugar', explica Otero, que aún lo mantiene: 'Es una forma de que los fans conozcan una cara mucho más personal e informal de nuestro grupo'.
El ecuatoriano Eduardo Arcos, creador del directorio Bitácoras.net, imagina más usos: 'Un periodista, en una guerra, publicando en tiempo real. O recomendar en mi bitácora un producto y que me den comisión'. Las mujeres son las más seguidas, como Betty, con una media de 250 visitas diarias. Empezó en agosto y ya se ha cansado, pero lo califica de 'tremendamente gratificante. La proximidad del lector es increíble. Se conoce a mucha gente, se despereza la mente y además sirve de terapia, porque alimenta mucho el ego'.
Verdades a medias
Pero no siempre se cuenta la verdad: 'Hubo una niña llamada kaycee que tenía cáncer terminal y escribía diariamente, con una cantidad de visitas inmensa. Al final resultó ser una señora de 40 años que quería demostrar el sufrimiento del cáncer', explica Arcos.
El engaño es menor en los weblogs colectivos, dice el profesor de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid y miembro de Barrapunto, Jesús González-Barahona: 'Las mentiras son desenmascaradas rápidamente por los usuarios. Hacemos muy poco contraste de noticias porque la inteligencia colectiva se encarga de ello. Y son también los lectores los que nos dicen qué quieren leer. La realimentación es varios órdenes de magnitud mayor que la de la prensa tradicional'.
La dulce Claudia-P
Dice Eduardo Arcos que el encanto de los weblogs personales está en 'lo extraordinario que puede ser seguirle la pista a un estilo de vida ordinario'. ¿Y qué hay más normal que una adolescente madrileña que trabaja en un cine, se pelea con su madre, come chocolate cuando está triste y quiere ser actriz? ¿Y si le añadimos un intento de suicidio, un padre desconocido y un carácter vital y sensible? Ésta es Claudia-P. Su diario íntimo es el éxito del momento, con asiduos que se declaran enganchados y otros que dudan si detrás no habrá un escritor bromista. A ellos responde Claudia: 'Hago ésto sólo para mí. Pensé que Internet sería un lugar seguro, donde ni mi madre ni mi hermano podrían leerlo nunca. Pero el otro día oí una conversación en el metro, hablaban de lo que yo había escrito. Me quedé un poco parada'. Amores, sueños y secretos danzan en este weblog atípico en el que todo se dice menos cómo ponerse en contacto con el escritor.
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