El mundo se blinda para evitar atentados en Año Nuevo

Las principales ciudades han reforzado sus medidas de seguridad para los festejos de Año Nuevo. París, Berlín, Madrid o Nueva York han decidido incrementar sus dispositivos, ya puestos en marcha de cara a la Navidad, para evitar posibles atentados. Las medidas van desde aumentar el número de policías desplegados en las calles a poner barreras en las plazas para evitar que se repita un ataque como el del 19 de diciembre en Berlín, cuando un terrorista atropelló con un camión a una multitud.

Berlín

La capital alemana desplegará 1.700 agentes adicionales para vigilar la ciudad, algunos de los cuales irán armados con metralletas, algo inusual en la policía de este país. "Se están tomando todas las medidas para prevenir un posible ataque", ha dicho el portavoz de la policía de Berlín, Thomas Neuendorf, a Reuters TV. Frente a la céntrica puerta de Brandenburgo, se han colocado bloques de hormigón para cerrar el paso a la plaza Pariser Platz, uno de las zonas más concurridas en la última noche del año.

La seguridad ha aumentado también en otras ciudades de Alemania. En Colonia, donde más de un centenar de mujeres fueron acosadas y víctimas de agresiones sexuales en los alrededores de la estación central en noche vieja, la policía ha instalado nuevas cámaras de vídeovigilancia para observar lo que ocurre cerca de la estación. En Frankfurt, sede del Banco Central Europeo y del aeropuerto más grande del país, más de 600 oficiales estarán de guardia; el doble que en 2015.

París

En todo el país, el Gobierno francés va a movilizar a 96.000 personas entre policías, gendarmes y militares para garantizar la seguridad de los festejos para recibir el año nuevo, según informó este viernes el ministro del Interior, Bruno Le Roux. En París, el foco de mayor atención de las autoridades francesas serán los Campos Elíseos, donde se espera la presencia de 600.000 personas para ver los fuegos artificiales. Soldados fuertemente armados patrullan los lugares más turísticos, como la Torre Eiffel, el Arco del Triunfo y el museo del Louvre.

Según las primeras cifras, el dispositivo de seguridad de la última noche del año estará compuesto por 52.600 policías, 36.000 gendarmes y 7.000 militares de la misión Sentinelle, que patrullan las calles, instituciones sensibles y centros estratégicos por todo el país.

Roma y el Vaticano

Las autoridades romanas han prohibido el acceso de camiones o furgonetas al centro de la ciudad. Además, la policía antiterrorista ha instalado barrearas en las rutas de acceso a los lugares más turísticos, como el Coliseo, o áreas donde se reúnen grandes multitudes, por donde patrullan desde antes de Nochebuena un mayor despliegue de policías y militares con armas de fuego.

Roma y Nápoles han prohibido que entren camiones al centro de las ciudades. En Milán, donde fue abatido el terrorista de Berlín, se han colocado controles de seguridad en torno a la plaza principal.

En el Vaticano, donde ya se instaló un despliegue para la Misa de Nochebuena del Papa Francisco en la Basílica de San Pedro, se ha reforzado el destacamento policial en las calles adyacentes.

Madrid

En la capital de España, la Policía ha comenzado a instalar maceteros, bolardos o incluso camiones para bloquear el paso de vehículos pesados o de coches a determinadas calles cercanas a la Puerta del Sol durante Nochevieja o a las calles del recorrido de la Cabalgata de Reyes; el 5 de enero. Los camiones y autobuses de más de 3.500 kilos no podrán circular por Madrid entre los días 3 y 5 de enero durante la celebración de las cabalgatas de Reyes en los barrios de la capital. La decisión excepcional del Ayuntamiento de Madrid pretende evitar un ataque terrorista similar a los de Berlín y Niza contra las multitudes de personas, sobre todos niños, que se concentran en las calles para los desfiles de estas fechas. La Policía Municipal no multará a los conductores que estén en los perímetros acotados, sino que se les indicarán los desvíos para evitar los recorridos y las vías de salida, según el Ayuntamiento.

Según Interior, 800 policías controlarán la Puerta del Sol durante las Campanadas y sus ensayos, el 30 y 31 de diciembre. Esto supone 300 efectivos más que el año pasado, cuando esta misma labor se encargó a 500 agentes. Pero es que, además, entonces, ya se elevó en un 15% el número de componentes del despliegue respecto a 2014.

España se encuentra en el nivel 4 de alerta terrorista —el más alto desde los atentados del 11-M— desde junio de 2015. Entonces, Interior decidió elevar el estado de alarma tras los ataques que sacudieron Túnez, Francia y Kuwait. Esta decisión se ha mantenido desde esa fecha y ha implicado un aumento de la vigilancia de las infraestructuras críticas —como aeropuertos, centrales nucleares y estaciones—, así como la activación de todas las fuerzas de seguridad dedicadas a la prevención, investigación e información de la lucha antiterrorista.

Bruselas

En marzo la ciudad sufrió un atentado que causó 16 muertos y más de 150 heridos. La alcaldía estuvo revisando la opción de cancelar los fuegos artificiales de Año Nuevo, pero finalmente ha decidido mantenerlos.

Viena

Especialmente pensado en proteger a las mujeres de posibles agresiones sexuales como las de Colonia, la policía ha repartido más de mil botones de pánico de bolsillo. "No hay por ahora evidencia de ningún peligro específico en Austria. Aún así, estamos hablando de un aumento de las situaciones de riesgo", ha dicho el ministro del Interior, Wolfgang Sobotka. "No dejamos nada al azar con respecto a la seguridad".

Nueva York

La ciudad va a desplegar camiones llenos de arena para bloquear Times Square y prevenir así cualquier ataque con vehículos similar a los que han ocurrido en dos ciudades europeas este año, aunque las autoridades no creen que haya ninguna amenaza contra la población. Se espera que hasta dos millones de personas festejen en la emblemática plaza neoyorkina. Habrá 65 camiones de basura llenos de arena colocados en posiciones estratégicas, y otros 100 vehículos más pequeños también funcionando como bloqueadores. Se ha asignado a 7.000 policías en toda la ciudad y en los festejos de las calles 57 y 59, que estarán cerradas al tránsito, estará prohibido llevar paraguas, bolsos grandes y alcohol. "La gente estará segura", ha declarado el comisionado de Policía de la ciudad, James O'Neil. "Vamos a tener uno de los eventos mejor vigilados por la policía y mejor controlados en uno de los lugares más seguros del mundo".