Nicolás Maduro: “Chávez es consciente de que su estado de salud es complejo”

En una entrevista televisada desde La Habana la noche de este martes, el vicepresidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció que este miércoles, 2 de enero, regresará a Caracas tras una visita de cinco días a la capital cubana en la que pudo ver al presidente Chávez “en dos oportunidades”.

La entrevista, ofrecida a la cadena regional latinoamericana TeleSUR –financiada y dirigida principalmente por el gobierno venezolano-, pareció programada para posicionar a Maduro como hombre de Estado y organizar una narrativa oficial acerca del proceso de enfermedad de Chávez, antes que para despejar las dudas surgidas sobre la salud del presidente venezolano que durante las últimas horas pulularon en las redes sociales. Precisamente, Maduro exhortó al pueblo venezolano a “vacunarse contra los rumores” y a tener “confianza y seguridad en las informaciones que estamos dando”.

Sin embargo, no tardaron en surgir en esas mismas redes sociales algunas reacciones críticas ante las palabras de Maduro, que muchos tomaron como el lanzamiento oficial de su candidatura a unas elecciones presidenciales que deberán ser convocadas si Chávez muere o si una incapacidad obliga al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) a declarar la “falta absoluta” del presidente.

El propio Chávez manifestó, en su última alocución pública del 8 de diciembre, su preferencia por Maduro como candidato del chavismo en tal eventualidad. Que Maduro es también la apuesta de la nomenclatura castrista —altamente dependiente del subsidio económico venezolano para su supervivencia— quedó claro este martes, cuando la entrevista tuvo lugar con una periodista de la televisión estatal cubana como única contraparte. La entrevistadora, Arleen Rodríguez, cerró el programa con una alusión a su creencia personal “en los milagros”.

Maduro continuó subrayando el coraje mostrado por Chávez para enfrentar una fase posoperataria “compleja”, y de cuyas complejidades, aseguró, el mandatario venezolano “está absolutamente consciente”. Enfatizó que esas dificultades están relacionadas con las complicaciones posteriores a la intervención quirúrgica a la que fue sometido el 11 de diciembre, pero ha mantenido en suspenso lo que pudiera estar ocurriendo con el proceso de fondo, un cáncer cuyo origen y características no han sido dadas a conocer de manera pública.

“Lo vi con una fuerza gigantesca. Lo saludé con la mano izquierda y me la apretó con una fuerza gigantesca, mientras hablábamos”, contó, con expresión conmovida. En su relato también hizo notar que el estado de salud del presidente ha experimentado durante sus tres semanas de hospitalización “ligeras mejorías, a veces situaciones estacionarias”.

Frente a las versiones que corrieron por Internet, que incluso han llegado a dar por muerto a Chávez, Maduro advirtió sobre los cálculos de una “derecha loca” que buscaría sembrar la desazón entre los partidarios del régimen revolucionario para convertir su amor por el líder “en rabia descontrolada”. A juicio de Maduro, esos intentos podrían desembocar “en un bogotazo”.

Cabe recordar que con frecuencia durante la última campaña electoral, el propio Chávez se definió como un dique de contención que da cauce a una ira popular que, de otra manera, se desbordaría con violencia. Esta posibilidad, ya como amenaza, ha sido recordada en estos últimos días por voceros del Gobierno.

Saliéndole al paso a las voces que, sobre todo desde la oposición venezolana, califican —a la luz de la gravedad actual del presidente— como una estafa que Chávez presentara su candidatura a las elecciones del pasado de 7 aún a sabiendas de su condición, Maduro hizo un repaso de esa postulación, asegurando: “Cuando se cercioró de que había superado esa etapa y que su cuerpo no tenía ninguna lesión, decidió, como el pueblo se lo pedía, lanzar su candidatura. La derecha siempre ha especulado con la salud de Chávez”.

El retorno de Maduro a Caracas este miércoles pudiera ser indicio de una estabilización de la salud de Chávez, cuyo estado real quedará expuesto el próximo 10 de enero, fecha en la que debería hacerse presente en la Asamblea Nacional para tomar juramento e iniciar su tercer período de gobierno, 2013-2019.