Hits with tits: "El apoyo a las chicas en los escenarios está de moda, pero no es real"
Hablamos con Ada Diez, que busca visibilizar el papel femenino en el ámbito musical y la ilustración. Una iniciativa feminista que editará su cuarto disco recopilatorio a través de crowdfunding
Empezó como un reto underground por encontrar las canciones más curiosas de bandas formadas solo por chicas, y acabó derivando en una de las iniciativas más interesantes que reivindican el papel de la mujer en el ámbito musical y de la ilustración. Hits with tits es el proyecto sonográfico de Ada Diez, ilustradora y diseñadora, y Lu Sanz, promotora musical y dj. Dos jóvenes de Valencia que duermen poco y trabajan mucho para demostrar todo el talento femenino que existe en el panorama y que muchas veces se trata de forma injusta.
Con las ideas claras y un criterio basado en la calidad, han conseguido editar a través de crowdfunding tres recopilatorios en el que descubren todas esas bandas que muchas veces pasan desapercibidas a causa del machismo que todavía existe en la escena. Las Piñas, Paisana, Las Cruces o Gurr, han formado parte de sus vinilos y compartido escenario en Truenorayo Fest, todo un referente en el circuito de festivales. A falta de unos días para que finalice el crowdfunding y puedan conseguir la financiación necesaria para editar el cuarto volumen, hablamos con Ada Diez sobre su colectivo.
¿Cuál fue el origen de Hits With Tits?
Empezó como una historia un poco millennial, como un pique de Facebook para ver quien ponía las canciones más raras de grupos de tías, de todos los países y épocas. Nos resultó muy curioso porque escuchábamos muchísima música creada por mujeres del underground, pero no se le daba la visibilidad que se le estaba dando a otras bandas. En un principio solo queríamos hacer una playlist de Spotify, pero al final Lourdes, que es bastante fetichista de los vinilos, se creció un poco. La idea a mí me encantó porque como ilustradora, siempre he querido hacer portadas de discos y nos lanzamos sin pensarlo mucho. Hicimos un crowdfunding sin que nadie nos conociera y nos dimos que era una idea que la gente quería, que está encantada de descubrir y escuchar otras propuestas.
Este sería el cuarto recopilatorio de Hits with Tits, ¿Ha evolucionado el papel de la mujer en la música desde que editasteis el primer volumen?
Las voces femeninas siempre están ahí, en el panorama musical, en el cómic o la ilustración, pero a la hora de normalizarlo es bastante difícil porque no encuentran apoyo. Muchas veces te encuentras con un machismo innato en cómo se tratan a los grupos de tías. Si ves cualquier festival, te das cuenta de que no hay ni un solo grupo compuesto por mujeres y si lo hay, es simplemente porque quieren cierta estética. Al final tratan a las mujeres como simples cantantes, nunca son consideradas compositoras o músicas. Lo que hacemos desde Hits with Tits es normalizar y visibilizar esa realidad. Los grupos de creadoras siempre están presentes, siempre lo han estado, otra cosa es que se haga justicia.
Es decir, no solo es un recopilatorio femenino, también es un recopilatorio feminista.
Bueno, al final todas las cosas que se hacen desde el proyecto son actos políticos, y lo que siempre se busca es la normalización y la igualdad. Eso es un poco la definición de feminista. Lo importante es que nos demos cuenta de que no todo vale y que a veces se están intentando abarcar espacios aprovechándose de ciertas modas. En teoría, esto de ser el apoyo de las mujeres en los escenarios está de moda, pero no se está haciendo una labor real. Se van poniendo pequeños parches que lo único que consiguen es crear cuotas en diversos espacios, pero que no reflejan ninguna igualdad. Queda mucho trabajo por hacer, y la única forma es pelearlo desde una perspectiva de mujer feminista.
Mas allá del underground, ¿creéis que es difícil encontrar artistas femeninas que se posicionen como feministas?
Creo que muchas veces las cosas se hacen sin darnos cuenta. Cada acto es un acto político, y representa determinadas cosas aunque no pongamos etiquetas. En el momento en que alguien decide tomar las riendas de su propia estética, de su propia música o de cómo lo crea, sin tener en cuenta los estándares de la sociedad, o de lo que se espera de esas personas, está reivindicando la normalización y la igualdad. Al final te das cuenta de que hay una solidaridad entre muchas mujeres. Tenemos muy inculcado que tenemos competir entre nosotras cuando lo que es interesante es crear puentes y que sirvan para que distintos colectivos conecten entre sí y se den cuenta de que no están solas y de que la creación femenina está muy presente en todos los aspectos culturales.
El criterio principal que seguís a la hora de escoger las bandas es que sean chicas, ¿alguna vez os han acusado de discriminación por no incluir a bandas de chicos?
Realmente, esto es lo de siempre, cuando la gente ve un proyecto interesante, quiere formar parte. Nosotras tenemos unas políticas bastante estrictas al respecto y a veces es un arma de doble filo. Si lo que quieres es que se visibilice a las mujeres, tienes que hacer que las mujeres estén presentes. Muchas veces lo que nos envían es porque no leen las bases, estamos tan preocupados por aparecer, que ni leemos el objetivo. Recibimos muchas propuestas de bandas formadas solo por tíos y son los primeros que deberían darse cuenta de que esto no puede ser así, que deberían ser los primeros en leer completo lo que se quiere conseguir, y que deberían ser los primeros en apoyarlo. De hecho, la mayoría de veces nos encontramos con ese apoyo. Lo que sí es cierto, es que hay que hacer una educación de base y para eso tienes que tener unos principios firmes y ser fiel al espíritu del proyecto.
Y a nivel ilustación o cómic, ¿cómo es la situación?
Al final, cualquier aspecto profesional es un reflejo de cómo está la sociedad, en donde nos encontramos con muchos obstáculos por el simple hecho de ser mujeres. Lo que debemos hacer es cambiar de perspectiva. Solo hay que fijarnos como representan a las mujeres en distintos sectores, que la RAE siga manteniendo que las mujeres son el sexo débil es un reflejo exacto de como están las cosas. La mayoría de alumnas de escuelas de Bellas Artes son mujeres, pero el porcentaje que llega a ser profesional es muy inferior. Te das cuenta de que primero te juzgan por ser mujer, luego por tu aspecto físico y luego por tus labores profesionales. El propio marketing hace mucho daño, creando estereotipos y creo que esto influye en todos los aspectos de la cultura.
Volviendo a vuestro recopilatorio, ¿qué destacarías de este cuarto volumen?
La verdad es que nuestros recopilatorios destacan por lo auténticos que son. Elegimos quien va a formar parte por la calidad de la propuesta. También lo montamos, con nuestra experiencia como djs, como si fuera una sesión. Mucha gente se lo pone en bucle, aunque suene un poco raro, pero se levantan a darle la vuelta. Lo que le resulta más interesante es que descubren muchos grupos y que funciona muy bien como disco en sí, siempre intentamos hacer algo muy redondo.
También contáis con mucha presencia internacional. ¿Cómo llegáis hasta ellos?
La gente al final tiene muchas ganas de hacer cosas, lo que hace que se corra la voz, por eso tenemos desde el principio muchos grupos interacionales. Creemos que hay que actuar a muchos niveles y este proyecto nos permite llegar a muchos países. Si haces algo que resulta interesante, la gente quiere participar, muchas veces con solo lanzar la convocatoria se llega a tanta que a veces nos sorprendemos. Yo siempre bromeo con que mi objetivo es que nos manden algún tema de Japón porque soy muy fan.
¿Cómo dirías que os ha quedado en su conjunto?
Bueno, todavía estamos peleando para que salga el crowdfunding. Al final es una propuesta que se consigue a través de las personas. Nos gusta el crowdfunding por el hecho de tener la capacidad de que la gente confíe en estos grupos y en nuestro criterio. Es muy interesante porque están invirtiendo directamente en lo que van a disfrutar. No llegarían a descubrir determinados grupos si no tuvieran esta posibiidad. Además, las subvenciones suelen ser bastante escasas, por no decir que la propuesta cultural en este país es nula y cada vez va a peor. Yo vengo del mundo de la autoedición y aprendes a sacar las castañas del fuego. Al final las cosas las haces con mucho activismo y mucha pasión.
Si tuvieras que hacer balance de todo o que habéis conseguido estos años, ¿con qué te quedarías?
Yo siempre soy muy fan de como tenemos la capacidad de conectar distintos colectivos y crecer. A veces faltan medios, o gente entusiasta para hacer cosas, o no nos damos cuenta de que ser músico o ilustrador es una profesión y cada vez están más degradadas por el poco respeto que tiene el propio público, los festivales o la prensa. Cada vez cuentan más los 'Me gusta' y nos quedamos en la superficie de los proyectos. Conocer a gente interesante y que hace cosas muy potentes en cada rincón, te hace darte cuenta de que hay más personas que está en la misma situación y que las cosas se solucionan a través de nuestra capacidad creativa y esto da mucha esperanza para seguir trabajando.
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