Refugiados en Dinamarca
La avalancha de inmigrantes y refugiados que optan por Dinamarca como destino en su legítima búsqueda de una vida mejor ha hecho imprescindible una reacción por parte de las autoridades danesas. Entre las medidas aprobadas por el Gobierno danés, la orden de confiscar bienes y valores —por ejemplo joyas que no tengan un valor sentimental— ha causado furor entre la comunidad internacional. En este sentido, convendría tener en cuenta que la sociedad de bienestar danesa se erige sobre un pilar fundamental: ayuda para el que no tiene nada y que se busque la vida el que sí. En efecto, para cobrar el subsidio de desempleo el parado danés debe deshacerse de su patrimonio hasta llegar al valor máximo de 1.300 euros. Una familia de solicitantes de asilo recibe mensualmente 8.954 DKK (1.202 euros) más alojamiento gratuito. Una vez obtenido el estatus de refugiado, dicha cantidad se transforma en 16.000 DKK (2.147 euros). ¡Qué pueblo más xenófobo e insolidario el danés!— Kasper Steenholt Olesen.
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