El muestrario
Las claves de la industria de la moda de la última semana
Star Wars hace (todavía) más caja
La maquinaria del merchandising de la saga Star Wars lleva décadas siendo imparable, pero desde que Disney compró en 2012 Lucas Film se ha convertido en la gallina de los huevos de oro. Ante el estreno de El despertar de la fuerza, son muchos los diseñadores (de Alvarno a Rodarte) los que se han inspirado en la cinta. Ahora le toca el turno a los almacenes neoyorquinos Bloomingdale’s, quienes llamaron a los creadores Rag & Bone y Diane von Fürstenberg para diseñar piezas con tintes galácticos.
Larga vida a Snapchat
Si primero fue Twitter y después Instagram como la plataforma favorita de las marcas para mostrar sus desfiles en vivo, dar noticias exclusivas o enseñar los entresijos del oficio, ahora Snapchat gana por goleada. Sí, todas las grandes enseñas llevan meses colgando allí sus fotos, Gucci (la que probablemente sea la firma más aclamada del último año) ha decidido enseñar su colección preotoño exclusivamente a través de esta aplicación. Quizá la moda encontró un medio tan voluble como ella.
La fundadora de Jimmy Choo, en bancarrota
En 2013, Tamara Mellon vendió el emporio del lujo Jimmy Choo para fundar su propia marca homónima de calzado de alta gama. Ahora, se ha declarado en bancarrota y un juzgado le ha dado 60 días para enmendar el concurso de acreedores. A la empresaria no le ha hecho falta esperar tanto: ya ha vendido el 31% de su compañía a la empresa de capital riesgo New Enterprise Associates (que también marca las reglas en el gigante de la moda online Moda Operandi).
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