Polémica por la delgadez de las modelos de Victoria Beckham
El poco peso de sus maniquíes en Nueva York reabre el debate sobre los cánones estéticos
"Me tomo mi trabajo muy en serio y no usaría nunca modelos demasiado delgadas". Corría el año 2010 cuando Victoria Beckham pronunció estas palabras. Lo hacía, además, al hilo de los rumores que acusaban a la cantante reconvertida en diseñadora de haber rechazado a varias modelos por no tener índices de masa corporal saludables.
Cinco años después, Beckham está en el punto de mira justamente por lo contrario. Las modelos del desfile que presentó el pasado domingo estaban tan sumamente delgadas que han encendido la mecha de las redes sociales. "@victoriabeckham, esas chicas están demasiado delgadas. Sé que hacen que la ropa luzca más, pero las mujeres reales también nos ponemos ropa", comentaba una usuaria de Twitter. "De nuevo, un fantástico ejemplo para mi hija de doce años #anorexia", escribía otra.
La polémica ha calado sobre todo en Reino Unido, el lugar donde Beckham tiene su centro de operaciones. Allí, varias asociaciones que luchan contra los desórdenes alimentarios y promueven una imagen femenina saludable, han alzado la voz contra la diseñadora.
"Nos consta que algunas jóvenes que sufren este tipo de desórdenes cogen fotos de esta clase y las ponen en la puerta del armario, porque quieren parecerse a esas modelos", declaraba al respecto la portavoz de la asociación británica B-eat, Lorna Garner, al diario The Guardian. Beckham, por el momento, no ha querido responder a las acusaciones, y se ha limitado a subir fotos de la colección a su cuenta de Twitter e Instagram.
Pero no es la única que ha recibido una amonestación de los medios durante esta Semana de la Moda de Nueva York: "El trabajo de Altuzarra, con sus sensuales vestidos y faldas, ganaría en sensualidad si se luciera sobre una mujer con curvas. Las clientas podrán comprobarlo por sí mismas en los probadores, sí, pero sería saludable y realista que el diseñador utilizara realismo en la pasarela”, escribía en Vogue USA Sarah Mower sobre la colección de Altuzarra, una de las más aclamadas de esta Semana de la Moda y, a la vez, una de las más polémicas.
Hace dos años, el consejo de diseñadores americanos (CFDA) consiguió que el gobierno regulara el trabajo de las modelos menores de edad en los desfiles. Parece que ha llegado el momento de legislar también sobre las medidas.
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