La violencia de género
Hemos conocido la propuesta del líder del PSOE, Pedro Sánchez, para que las víctimas de violencia de género tengan un funeral de Estado, a la vez que sean consideradas como víctimas del terrorismo. Dos iniciativas aparentemente muy loables, pero no obstante erradas en su sentido y oportunidad. En efecto, ¿qué sentido tiene intentar dotar de una relevancia especial a estas mujeres una vez muertas? Si realmente el Estado quiere tomar en serio esta problemática tendría que preocuparse justamente de evitar dichas muertes por todos los medios legales disponibles, antes que del tipo de funeral que les brindará cuando ya sea demasiado tarde. Asimismo, la connotación de terrorismo machista resulta confundente y hasta exculpatoria respecto de los responsables, pues traslada el foco del problema hacia una inexistente articulación de los agresores con miras a causar un daño estructural a la sociedad, como la connotación del concepto de terrorismo indica. No. La violencia de género remite a una cuestión mucho más cotidiana, silenciosa y menos premeditada, pero por ello de más difícil pesquisa dada su naturalización. Se trata de hombres que solo saben recurrir a la violencia como forma de resolución de conflictos, una conducta aprendida en el marco de una sociedad patriarcal que se sostiene en profundas desigualdades entre mujeres y hombres.— Paulina Morales Aguilera.