El desempleo, una epidemia
Desde hace ya mucho tiempo asistimos a un discurso político y social que reclama medidas contra el paro juvenil. Sin entrar en el hecho de que aún no se han aportado soluciones efectivas de ningún tipo, quisiera hacer ver que esto no es más que una simplificación del problema. La lacra del desempleo afecta a gente de todas las edades. Hablar de paro juvenil y detener ahí el discurso es como si, ante una pandemia, solo se tomaran medidas sanitarias destinadas a los más jóvenes, dejando al resto de afectados a su suerte.
Sería bueno empezar a dar al desempleo el mismo tratamiento que se daría a una epidemia: no reparar en medios para su erradicación y que todo ciudadano con medios arrime el hombro, siendo el Gobierno, que en la actualidad protagoniza una alarmante dejación de sus funciones, el que lidere ese proceso.
Y que todos tengan la misma oportunidad de “curarse”, de volver al mundo de los que trabajan, independientemente de la edad que tengan.— Miguel Ángel Jiménez Guerra.
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