¿Privatizar la sanidad?
¿De verdad la única forma posible de recortar gastos en sanidad es privatizando? ¿De quién será la sanidad pública? ¿Qué accionista y en qué paraíso fiscal se beneficiará de nuestro trabajo? ¿Qué sucederá el día en el que los que nos compran los hospitales quiebren o decidan vendernos nuevamente? La gestión pública de la sanidad tiene problemas, desde luego. Ha habido excesos y despilfarro, como en casi todas partes, mucha medicalización y poca prevención y educación para la salud. Hagamos un buen ejercicio de autocrítica. Hablemos de todo ello, veamos qué hemos aprendido, cómo cambiamos, cómo ahorramos, cómo mejoramos... ¿Es que no se puede hacer todo eso sin privatizar la sanidad?— Ibone Olza
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