Tamara Ecclestone, la infeliz niña rica

A Tamara Ecclestone nunca le ha molestado la atención mediática, es más, la ha buscado. Ha posado en ropa interior, mostrado su enorme colección de zapatos de firma, protagonizado un reality para la televisión británica en el que aparece llevando a sus perros al spa en Harrods y acudiendo al hospital porque le sale un grano. Hasta ha posado en una sesión de fotos en la que aparece desnuda y cubierta de billetes, un burdo guiño a la fortuna de su familia y a la suya propia. Pero ahora la hija mayor del dueño de la fórmula 1, Bernie Ecclestone, es noticia por tener que lidiar e intentar ocultar un asunto para ella desagradable.

La heredera de Ecclestone fue convocada a la oficina de Bernie en Londres. Allí se encontró con sus padres, separados hace un par de años, que abrieron un ordenador portátil ante sus ojos y le mostraron un vídeo casero. En las imágenes se veía al novio de Tamara, Omar Khyami, siéndole infiel con un transexual.

Kyami, que estuvo en prisión por vender relojes Rolex robados, insistió ante su novia que la filmación fue parte de la despedida de soltero de un amigo, que se celebró antes de conocerla. Pero Tamara no le creyó, había demasiadas pruebas y, además, el transexual llevaba puestas dos pulseras de Cartier que le había regalado. Así que la heredera rompió con él, lo anunció en su Twitter, eliminó el tatuaje con su nombre y, por si no había quedado clara su decisión, cambió las cerraduras de su gran mansión en Chelsea en la que incluso posee una bañera valorada en más de un millón de euros.

“Lo pasé mal. Me sentí muy avergonzada por mis padres”, ha contado en una entrevista al diario británico The Telegraph. “Fue mejor enterarme entonces que años más tarde, cuando tuviésemos hijos”. La ruptura sucedió antes del verano, pero la infelicidad de la niña rica no se ha conocido hasta ayer. “Después de tres años y medio junto a él, siento que no le conocía”, señala.

Esta no es la primera vez que la heredera de 28 años se ve traicionada. Su primer novio vendió su historia a la prensa. Hace unos meses denunció a dos hombres por chantaje. Le amenazaban con divulgar detalles de su vida amorosa si no les entregaba unos 250.000 euros. “Aún creo en que encontraré a alguien. Creo en los finales felices”, asegura. Como apunta la prensa británica una modelo de lencería que conduce un Ferrari y vive en una casa valorada en 55 millones de euros en teoría no tendría problemas para encontrar pretendientes. La realidad es que ni la más fabulosas de las fortunas protegen contra el mal de amores.

Su hermana menor Petra, que ha probado suerte como diseñadora de su propia línea de moda, se casó el año pasado con James Stunt en una celebración millonaria en Italia, que incluyó actuaciones de Eric Clapton y Black Eyed Peas. Su propio padre consideró exagerada la cantidad que tuvo que desembolsar.

Tamara y Petra vivieron la separación de sus padres en 2009, después de 24 años de convivencia. A pesar de la ruptura, la pareja mantuvo una relación amistosa. La exseñora Ecclestone, la modelo croata Slavica, recibió tras el divorcio alrededor de 670 millones de euros y lo celebró comprándose un jet privado.

Este verano, Bernie contrajo matrimonio con la directora de marketing brasileña Fabiana Flosi, casi cinco décadas más joven que él. Por lealtad a su madre, ninguna de sus hijas acudió a la boda en la casa familiar de Suiza y permanecieron juntas en Los Ángeles, donde vive Petra.