Francia crecerá menos este año por los atentados y las huelgas

El Ejecutivo francés ha dado por fin la razón a los expertos que coincidían en calificar de demasiado optimistas sus previsiones de crecimiento para este año. En un informe presentado este miércoles al Consejo de Ministros por los titulares de Economía y de Vivienda, se reconoce se han producido “factores temporales y excepcionales” por los que, muy posiblemente, el crecimiento será “ligeramente más débil” que el 1,5% previsto. Esos factores, precisan, son los atentados, las huelgas contra la reforma laboral y las malas cosechas.

A solo medio año de las elecciones presidenciales, el dato es un nuevo jarro de agua fría para la pretensión de François Hollande de ser candidato a su propia sucesión, que prevé oficializar el mes que viene. El tropiezo se suma al disgusto propinado por el Alto Consejo de Finanzas Públicas, el organismo encargado de evaluar si las previsiones gubernamentales son o no realistas, que en septiembre ya declaró “improbable” que el déficit francés se sitúe el año que viene por debajo del sagrado 3% del PIB.

Los augurios oficiales indican que el desequilibrio en las finanzas públicas será este año del 3,3%, y el año que viene, del 2,7%. Es el compromiso adquirido con la Comisión Europea, que ya ha concedido dos prórrogas a París para equilibrar sus cuentas. Si lo incumple nuevamente, será imposible escapar a una sanción de Bruselas por reiterado déficit excesivo.

En el tercer trimestre de este año, la economía creció solo un 0,2% y, el anterior, se contrajo un 0,1%. Pese a todo, el Ejecutivo sostiene que “no es preocupante” el escaso crecimiento porque, frente a esos factores excepcionales –los sindicatos paralizaron en primavera sectores estratégicos del país- las bases que tiran de la economía se comportan “de manera satisfactoria”.

Hollande se ha comprometido a no volver a ser candidato si no hay creación de empleo

Se refiere al aumento de inversión (a un ritmo del 3,8% este año) y de consumo. Como prueba, el Ministerio de Economía señala que la construcción sigue siendo un sector muy activo. En los últimos doce meses se han concedido más de 430.000 licencias de construcción (más 14% con respecto al año anterior), un dato que, a su vez, influye en la disminución del desempleo.

En 2013, la tasa de paro se situaba en el 10,3%, una de las más altas de las últimas décadas en el país. A mitad de este año, bajó al 9,6% y Hollande prevé que pronto esté por debajo del 9,5%, un porcentaje similar a cuando en mayo de 2012 llegó al Elíseo. De hecho, ha condicionado ser candidato a la creación de empleo.

Uno de los puntos más criticados es el gasto público, que se mantiene alrededor del 55%, uno de los más elevados del mundo. Los candidatos de la derecha, como Nicolas Sarkozy o Alain Juppé, prometen que, si llegan al poder, como indican las encuestas, rebajarán ese capítulo entre 100.000 y 150.000 millones de euros.