El legendario Nick Lowe ofrece su último disco
Tras ese look de venerable e ilustrado sesentón, esa media melena blanca y esas gafas de pasta negra, se oculta uno de los más experimentados creadores de canciones surgidos de la nueva ola británica. Pero si sus únicos méritos se redujeran a eso, a haber sabido captar la efervescencia del tránsito de la década de los setenta a los ochenta en los tres minutos que duran What's So Funny 'Bout Love, Peace and Understanding, Heart o Cruel To Be Kind, no tendría sentido que le diéramos tanto pábulo.
Porque Nick Lowe no es otra agonizante estrella que trata de sacar lustre a un cancionero recubierto de polvo. No, Nick Lowe es aún hoy en día un excelente compositor de maravillosas canciones. Canónicas, imperecederas, de aroma clásico pero perdurabilidad sin fecha. De aquellas que hoy Richard Hawley o Ron Sexsmith firmarían encantados. The Old Magic es la prueba, un reciente álbum, el décimoquinto de su exquisita carrera en solitario, que presenta esta noche en Valencia, a partir de las 22.00 en El Loco Club (Erudito Orellana, 12).
Su actuación llega tres años después de su última visita a la ciudad, a la desaparecida sala Greenspace. Y, como en aquella fecha, lo hace acompañado de un telonero de lujo: Geraint Watkins, pianista colaborador del propio Lowe en algunos de sus discos, colaborador también de viejas leyendas como Bill Wyman & The Rythm Kings o Peter Green y detentador de una excelente discografía en solitario, que tiene en el estupendo In a Bad Mood, de hace tres años, su último capítulo. La actuación de esta noche se presenta como una de las escasísimas citas internacionales de carácter obligatorio para todo el que mantenga el gusto por el rock y el pop.
