Ibazeta declara a la juez que fue un "mediador" de los 'okupas'

El secretario del alcalde de San Sebastián, Josetxo Ibazeta, se exculpó ayer ante la juez de cualquier responsabilidad en la ocupación de una vivienda particular de la Parte Vieja donostiarra. En su declaración como imputado, aseguró que se limitó a actuar como "mediador" entre los asaltantes del edificio y la Guardia Municipal que trataba de impedir la entrada de los jóvenes a la casa. La titular del Juzgado de Instrucción número 5 de San Sebastián, que investiga este caso, también tomó testimonio como testigo a una hija de Ibazeta, menor de edad, por su presunta participación en los hechos. La casa, bautizada por los jóvenes como Uxotegi, sigue en poder de estos desde el pasado 24 de septiembre.

Izagirre afirma que su secretario siguió las "consignas" del Ayuntamiento

El juzgado investiga la ocupación del edificio y la intervención de Ibazeta, exedil de Euskal Herritarrok y secretario de Juan Karlos Izagirre, de Bildu, tras la denuncia presentada por la propietaria de la casa. Ibazeta se personó en el lugar de los hechos y, según los denunciantes, actuó como "responsable" de los jóvenes okupas. Según consta en los informes de la policía local, se identificó con la tarjeta de visita que figura su cargo como secretario del alcalde y "presionó" a los agentes para que no impidieran la ocupación del inmueble, asegura la representación legal de la dueña.

El gobierno donostiarra ha asegurado en todo momento que Ibazeta intervino como "interlocutor" entre los miembros de la Gazte Asanblada y la Guardia Municipal. Cuando la titular del juzgado le mostró ayer las fotos de algunos de los ocupantes, Ibazeta aseguró que no conocía a ninguna de esas personas, según fuentes del caso. La juez también tomó declaración a dos de los okupas mayores de edad. El abogado de la dueña de la vivienda aseguró que la hija de Ibazeta podría quedar imputada en un procedimiento separado que deberá instruir el Juzgado de Menores.

Ibazeta acudió a los juzgados arropado por el alcalde y la mayoría de concejales de Bildu. Izagirre aseguró que su secretario actuó "siguiendo las consignas del Ayuntamiento", por lo que dijo no entender el motivo por el que tuvo que declarar como imputado. Expresó su "solidaridad" con Ibazeta y afirmó que unos hechos de esta naturaleza serían "un escándalo" en una ciudad gobernada por otro partido político. Y advirtió de que su equipo municipal va a seguir apoyando las "labores de intermediación" porque "la época de la confrontación tiene que desaparecer".