Gallardón pide al Estado el dinero de los impuestos que no paga la Iglesia

El pleno del Ayuntamiento de Madrid aprobará hoy, a iniciativa de IU y con el respaldo del PP, una proposición para instar al Gobierno central a compensar a la capital por la incidencia negativa de sus políticas fiscales en las arcas municipales.

La propuesta inicial de IU se refería únicamente a las exenciones en el impuesto sobre bienes inmuebles (IBI) para determinados edificios, que detraen a la Hacienda local 94 millones al año. De hecho, la coalición de izquierdas ha pedido al Ayuntamiento que detalle qué Administraciones e instituciones, y en qué medida, se ven beneficiadas por estas exenciones, "con especial mención a lo relacionado con la Iglesia católica".

Sin embargo, el Gobierno local, con mayoría absoluta del PP, ha ido más allá y ha acordado con IU enmendar el texto para instar al Estado a compensar al Ayuntamiento por el impacto de todas sus políticas fiscales, que cifra en 120 millones.

El Ayuntamiento cifra en 94 millones sus 'pérdidas' por exenciones del IBI

La Ley de las Haciendas Locales estipula que la Iglesia está exenta de pagar el IBI en virtud de los Acuerdos entre el Estado y la Santa Sede de 1979. Esta "exención total y permanente de la contribución territorial urbana" afecta a templos y capillas, residencias de obispos y sacerdotes, oficinas, seminarios y conventos.

Además, tampoco pagan el IBI los edificios públicos dedicados a seguridad ciudadana (comisarías), servicios educativos (colegios) y penitenciarios (cárceles), o a la defensa nacional (cuarteles), los inmuebles de la Cruz Roja, las sedes diplomáticas de otros países y las estaciones de ferrocarril. También quedan exentos los edificios catalogados como patrimonio histórico, lo que no se refiere únicamente a monumentos, sino, por ejemplo, a inmuebles antiguos del centro de la ciudad.

En opinión del concejal de IU Jorge García, desde la llegada a la alcaldía de Alberto Ruiz-Gallardón (2003), "el recibo del IBI ha llegado a triplicarse para muchos vecinos, mientras que ni el arzobispado paga por ninguna de sus iglesias, ni la Administración central por ninguna de sus oficinas, ni incluso algunos hoteles de lujo por su condición de patrimonio histórico y cultural". "Esta situación siempre ha sido injusta, pero con la crisis, la falta de ingresos y el recorte de servicios ya es insostenible", añadía.

El Ayuntamiento coincide. A sus responsables les solivianta especialmente que determinados edificios históricos no tengan que pagar el IBI aunque se dediquen a actividades comerciales (hoteles, restaurantes, etcétera), pese a que sí que cumplen con otras obligaciones fiscales, como el impuesto de sociedades. Tampoco entienden la exención a las estaciones, cuando AENA sí debe tributar por el aeropuerto de Barajas.

Por ello, sin entrar en el fondo del asunto (es decir, si la Iglesia y demás deben estar exentos o no), se ha sumado a IU para exigir que el Estado le compense. Argumenta que debe ser el Gobierno central el que arrastre el coste económico de los acuerdos que firma. Por ejemplo: si la embajada de tal país no paga el IBI porque, a su vez, la embajada española en ese lugar no debe abonar otro impuesto similar, el Ayuntamiento cree que debe ser compensado, puesto que ese ahorro revierte en la Administración central, pero en detrimento suyo.

Y añade: la ley establece que los colegios concertados también están exentos de pagar el IBI, pero "esta exención debe ser compensada por la Administración competente". Este es el modelo que desea para el resto de casos. O, en su defecto, que se varíe el modelo de financiación local para que quede en sus manos decidir a quién se le permite librarse del IBI y a quién no.

IU lo explica así: "Las medidas del Estado para controlar el déficit han derivado en una reducción drástica del margen de maniobra de las entidades locales que, en algunos casos, han paralizado inversión y servicios". Por ello, es "urgente revisar determinadas políticas fiscales que limitan la capacidad de intervención municipal y suponen una injerencia al principio de autonomía y suficiencia de los recursos".