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CiU y PP abren la puerta para privatizar más empresas públicas en Barcelona

El PSC se abstendrá en el debate de las ordenanzas en un gesto hacia Trías

Convergència i Unió sabe que tiene en el PP un socio perfecto a la hora de buscar privatizaciones o consorcios. Ambos partidos incluyen estas iniciativas, con diferente intensidad, en sus programas electorales. Por ello, ayer no tuvieron problema para llegar a un acuerdo en la Comisión de Presidencia del Ayuntamiento de Barcelona para elaborar un diagnóstico del entramado de empresas y organismos municipales. Con los números claros será más fácil ver qué se puede entregar a privados o mantener de manera mixta.

La proposición inicial presentada por el PP hablaba de un "plan de reducción y privatización de empresas públicas y organismos autónomos". Tras transaccionarla con CiU, el enunciado cambió a "plan de análisis con el objetivo de reducir estructuras y los costos que [las empresas] generan mediante fórmulas públicas, privadas o mixtas". El resto de las formaciones la votaron negativamente.

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Desde que llegó a la alcaldía, CiU ha hablado de sus planes para reducir la estructura consistorial. Por lo pronto, las primeras en lista para tener una gestión privada son el parque de atracciones del Tibidabo -propiedad del Ayuntamiento desde 2002- y el anillo olímpico.

Respecto al parque del Tibidabo, la segunda teniente de alcalde, Sònia Recasens, explicó: "No es una cosa que se pueda hacer de un día para otro; primero hay que sanearlo y prepararlo". La decisión se inscribe dentro de un contexto de "optimizar y racionalizar recursos", explicó la concejal de CiU.

Abstención socialista

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Por otro lado, el PSC hará reserva de voto hoy en la comisión de economía del Ayuntamiento de Barcelona donde empezará el trámite de las ordenanzas fiscales. "No hemos tenido tiempo de estudiar la propuesta porque nos la han dado hoy", argumentaban fuentes del PSC. Otras voces del mismo partido señalaban, en cambio, que es un gesto hacia el alcalde, Xavier Trias (CiU), de que no han cerrado la puerta del todo con vistas a la aprobación de los presupuestos de la ciudad de 2012. Por el medio están las elecciones generales y el resultado puede influir en los pactos municipales.

De momento, CiU ha negociado las cuentas cara a cara con el PP que lidera Fernández Díaz. El líder del PP aclaró ayer que parte de las medidas de la propuesta que hace CiU para las ordenanzas fueron aportadas por su partido, pero insistió en que no dará el sí -al menos hoy -si Trias persiste en subir el IBI el 3%. Sobre esa postura "pedimos una rebaja del 3%", dijo Fernández Díaz. En realidad, no se trata de una rebaja, sino de mantenerlo. Incluso eso tampoco es así ya que CiU quiere anular la bonificación de la domiciliación bancaria que oscila entre el 1,5% y el 2%. Las posturas entre CiU y PP se podrían acercar antes de la comisión de hoy, aseguraban ayer los negociadores de ambas partes. En cambio, ICV-EUiA y UxP tienen claro que votarán en contra.

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