Christine Picasso exige la salida del director del museo
El Patronato discutirá mañana si destituye a José Lebrero
Christine Ruiz-Picasso ha llevado al límite su enfado por la exposición Viñetas en el frente, que recupera una serie de ilustraciones que el pintor realizó en 1937 contra el levantamiento militar de Franco y con las que quería recaudar fondos para la causa republicana, y ha situado al Museo Picasso Málaga (MPM) al borde de una crisis sin precedentes en sus casi ocho años de vida. La presidenta de honor no se conforma con haber manifestado su malestar en público y haberse negado a inaugurar la muestra el pasado lunes, sino que quiere además la cabeza del director artístico del centro, José Lebrero.
El consejero de Cultura, Paulino Plata, desveló ayer que el mismo lunes Christine Picasso le entregó una carta en la que pide la destitución de Lebrero, y en la que básicamente utiliza los mismos argumentos que en el comunicado que entregó a la prensa, la consideración de que hay una "utilización política oportunista" de la figura de Picasso en "un momento electoral delicado".
El asunto se verá mañana en una reunión del Patronato y sería muy incómodo que el asunto tuviera que someterse a una votación. En el Patronato, la familia Picasso cuenta con siete miembros, los mismos que la Junta, y nadie tiene voto de calidad. Pero más allá de la aritmética, la crisis deteriora al museo. Si Lebrero continua sin que Christine haga una gesto en su favor, quedaría en una situación delicada por el recelo de la familia, pero si se le destituye bien se podría interpretar que es una imposición de la censura.
La Consejería de Cultura cierra filas con Lebrero, de quien se destaca su profesionalidad en los dos años que lleva al frente del museo, y aunque ayer Plata evitó referencias personales para no mantener debates en público, fue muy elocuente. "Desde el Gobierno andaluz defendemos valores que creo que comparten todos los ciudadanos como la libertad de creación y de expresión", dijo Plata.
Lebrero es el tercer director que tiene el MPM, pero el primero ajeno al entorno de la familia Picasso. Carmen Giménez, promotora de gran prestigio, puso en marcha el museo y fue determinante en el buen entendimiento entre la Junta y Christine y su hijo Bernard, mecenas de la pinacoteca. Giménez se fue al poco de inaugurarse, y le sucedió Bernardo Laniado-Romero, un hombre formado en su equipo y con poca experiencia como gestor.
En 2009 la Junta apostó por un giro y confió la pinacoteca a José Lebrero, hasta entonces director del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, y ex responsable del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (Macba). Lebrero ha abierto el MPM, al que se le reprochaba estar de espaldas a la ciudad, y ha intensificado las relaciones con la sociedad local. El grupo de apoyo en Facebook No a la destitución de José Lebrero reunió ayer en pocas horas a más de 400 personas. La muestra Viñetas en el frente es una coproducción con el Museo Picasso de Barcelona en el que ya estuvo expuesta sin que nadie alzara una voz de protesta.
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