Caja Madrid pone a la venta una de las torres KIO
Caja Madrid, o mejor dicho la unión de esta entidad con Bancaja y cinco cajas más en el Banco Financiero y de Ahorro (BFA), reordena todo su patrimonio inmobiliario y no quieren perder ninguna oportunidad de venta. Ayer hizo oficial que Aguirre Newman, la consultora fundada por Santiago Aguirre (hermano de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre) y su socio Stephen Newman, ha recibido el mandato de poner en venta la sede actual de Caja Madrid en una de las inclinadas torres KIO de la plaza de Castilla.
Sin embargo, esta venta podría no ser la única, ya que fuentes del mercado apuntan que la entidad presidida por Rodrigo Rato no descartaría la venta de la torre de Norman Foster, situada en la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid, si encontraran un comprador. Caja Madrid pagó 815 millones a Repsol por este edificio hace cuatro años y ahora está valorado en la mitad. La entidad financiera ya ha provisionado esta minusvalía en sus cuentas.La fusión de siete cajas de ahorros (Caja Madrid, Bancaja, Caja de Canarias, Caja de Ávila, Caixa Laietana, Caja Segovia y Caja Rioja) ha generado una enorme cartera de edificios. La entidad, necesitada de recursos por la fuerte caída del negocio, ha decidido empezar por la Torre KIO porque considera que es más fácil de vender que la de Norman Foster. En el mercado se especula con que podrían obtener alrededor de 200 millones por la sede actual.
Hace 14 años, la entidad adquirió la Torre KIO por 100 millones de euros. En su contrato de venta con Aguirre Newman, la caja exige un tiempo mínimo para trasladarse a otro edificio.
La torre de Foster parece muy ampulosa para una entidad que está realizando fuertes recortes de gastos y planea despedir a miles de trabajadores. Solo el traslado de un edificio a otro supone un alto coste para la caja. Además, la torre de Foster está considerada excesivamente grande. Mientras que en la sede actual trabajan 1.600 empleados, la nueva torre tiene capacidad para 4.000 trabajadores. Cuenta con una superficie de 74.000 metros cuadrados y 44 plantas entre oficinas y espacios técnicos, así como cinco plantas bajo rasante.
Si surgiera una oportunidad, el Banco Financiero y de Ahorros (matriz de Bankia, que saldrá a Bolsa próximamente) no descarta buscar una nueva sede para Madrid en una ubicación diferente y más económica que la actual. El problema es que el mercado inmobiliario está congelado y no será fácil encontrar un comprador dispuesto a ofrecer un precio atractivo para Caja Madrid.
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