Un cumpleaños discreto
La Alhóndiga inaugura una exposición de carteles de Corea del Norte coincidiendo con su primer aniversario
La Alhóndiga ha cumplido el primer año de su nueva vida sin hacer ruido. No ha habido ni fiestas públicas ni actos conmemorativos un año después de la inauguración oficial del centro de ocio y cultura. "La contención presupuestaria" ha obligado a limitarse a la programación de las actividades ordinarias, explica su consejera delegada, Marian Egaña. El cumpleaños coincidió ayer con la apertura de una exposición de carteles de propaganda del régimen comunista de Corea del Norte, editados a lo largo de las seis últimas décadas.
La Alhóndiga calcula que por el atrio del edificio, una especie de plaza pública cubierta que da acceso a todas las instalaciones, han pasado cerca de 3.486.000 personas desde que empezó a recibir visitantes. El centro ha emitido 57.600 tarjetas de socio y sus servicios de actividad física, la piscina y la mediateca, que fueron abriendo sus puertas progresivamente, han sumado cerca de dos millones de usuarios.
El centro de ocio y cultura ha recibido la visita de cerca de 3.486.000 personas
Reconvertir la vieja Alhóndiga construida a principios del siglo XX en un complejo para el deporte, el ocio y la cultura de unos 43.000 metros cuadrados, diseñado por el francés Philippe Starck, requirió una inversión de 75 millones de euros. Egaña considera satisfactorios los números que ahora arroja su actividad: cada día acuden al centro entre 9.500 y 10.000 personas. Son visitantes fieles que declaran ir entre una y tres veces por semana. Buena parte de ellos asisten a los 270 cursos de actividad física que se imparten cada mes.
Una encuesta elaborada el pasado marzo concluyó que nueve de cada 10 usuarios hacen una valoración positiva o muy positiva de la Alhóndiga, y la calificación global del proyecto alcanza un notable alto. Tan solo el 1% de los sondeados respondió que la oferta no le interesa, mientras que el 94% recomendaría acudir a la Alhóndiga.
En la parte negativa, la señalización del atrio recibe las mayores críticas, pues los usuarios la consideran insuficiente. La Alhóndiga no ha conseguido solucionar el problema del reloj de la piscina. Sigue el que se instaló de forma provisional mientras no se hallase listo el definitivo, que incluirá medición de la temperatura y del grado de humedad ambiental. Egaña lamenta que "una minoría no sea cuidadosa con las instalaciones". La desaparición de pomos, por ejemplo, y los actos considerados "vandálicos" han supuesto un gasto de 7.000 euros.
La Alhóndiga ha celebrado su primer aniversario con una reunión interna a la que fueron invitados los 307 trabajadores que prestan sus servicios en el centro, contratados directamente o a través de empresas de servicios. Para el público, el aniversario tan solo ha coincidido con la apertura de una muestra de carteles de Corea del Norte. Pese a su colorido, no componen una exposición de toque festivo. Corea del Norte: el peso de la historia reúne 164 carteles y 28 originales empleados para la propaganda del régimen comunista, que lanzan consignas básicas sobre el esfuerzo de los trabajadores y llamamientos al patriotismo y a la unidad, con la estética del realismo socialista. Los carteles siguen siendo el medio fundamental de trasmisión de los mensajes del poder en el país más hermético del mundo.
Los carteles, propiedad de un coleccionista chino, se exponen por primera vez. A ellos se suman las pinturas cedidas por un organismo oficial de relaciones culturales. La proyección de documentales, filmes de ficción y conferencias completarán la información sobre Corea del Norte.
Homenaje a Eguillor
Juan Carlos Eguillor recibirá el homenaje de sus amigos bilbaínos el próximo miércoles en el auditorio de la Alhóndiga (19.30). Un grupo de juancarlianos y eguilloristas, ha organizado un encuentro en memoria del ilustrador, dibujante, humorista, y pionero del videoarte, quien falleció en Madrid el pasado 21 de marzo. A la espera de una exposición que reúna lo mejor de su trabajo creativo, el acto de la Alhóndiga quiere convertirse en "un reconocimiento de su singular trayectoria vital, prototipo del txirenismo bilbaíno", explican los organizadores. Eguillor fue, por ejemplo, el autor en 1978 del primer cartel de las fiestas de Aste Nagusia.
Entre los participantes en el homenaje figurarán Bernardo Atxaga, Javier Gurrutxaga, Elena Santonja y Borja Cobeaga, pero el acto estará abierto a la intervención de todos los asistentes que quieran compartir sus recuerdos y sus anécdotas. La entrada al auditorio será gratuita, pero con invitación, que podrá retirarse en la propia Alhóndiga.
