La Audiencia condena a 26 años de prisión a dos etarras
La Audiencia Nacional ha condenado a Xabier Rey (Pamplona, 1981) y a Aurken Sola (Pamplona, 1979) a 26 años de prisión cada uno por formar parte del comando terrorista Hego Haizea de ETA, que elaboró una lista de ediles, policías y escoltas contra los que pretendían atentar.
En su sentencia, la Sección Segunda de la Sala de lo Penal les impone una pena de 10 años por pertenencia a banda armada, ocho por depósito de armas de guerra y otros ocho por tenencia de explosivos. La fiscalía pedía para ellos 39 años de prisión, pero los magistrados les han absuelto de uno de los cargos que pesaban contra ellos, conspiración para cometer asesinatos terroristas.
El tribunal considera que, para sostener esa acusación, era "necesario" que se hubiera "planificado ya por algunos de los integrantes del grupo terrorista una acción delictiva bien delimitada". El comando contaba con una lista de objetivos, "[pero] no se encuentra precisado ni el día y lugar [del atentado], solo está acreditada la voluntad general de atentar", por lo que, en opinión de los jueces, "no se habría avanzado lo suficiente en la planificación para estimar la existencia de un delito de conspiración".
La novia, absuelta
Los magistrados sí consideran probado que formaron parte de un comando terrorista a las órdenes del exjefe militar de ETA Garikoitz Aspiazu, Txeroki. El 15 de octubre de 2008 se reunieron en Hendaya (Francia) con este, que les entregó datos sobre posibles objetivos, armas y explosivos. Los dos etarras fueron detenidos 12 días después. Txeroki cayó el 17 de noviembre de ese año.
El tribunal absuelve a Sergio Boada y a Araitz Amatria, para quienes la fiscalía pedía ocho años de cárcel por colaboración con banda armada. Respecto a esta ultima, los magistrados estiman que "solo se ha acreditado que es pareja sentimental de Rey", no su pertenencia a ETA.
Tampoco consideran probada la acusación contra Boada, pese a que este prestó ayuda informática a Rey (le proporcionó programas para borrar archivos); además, de los documentos que le fueron incautados solo se puede desprender, en opinión de los jueces, su relación con organizaciones de la izquierda abertzale, "sin que ello indique que se le puede considerar colaborador de la banda" terrorista.
