Fomento promete 51.300 millones de inversión en el corredor mediterráneo

"Esta es la España que queremos. Una España sin kilómetro cero. Donde todo sea centro y nada periferia". Así justificó José Blanco, ministro de Fomento, la inversión de 51.300 millones que llevará a cabo el Estado en el corredor mediterráneo, el eje ferroviario de alta velocidad, con ancho europeo y doble vía (una para mercancías y otra para pasajeros) que conectará Almería con la frontera francesa antes de 2020. En un "largo plazo", la salida a Francia llegará también hasta Algeciras, principal puerto de España.

El corredor ferroviario mediterráneo de velocidad alta discurrirá por Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia y Andalucía. El proyecto ha servido para tejer una inusual complicidad entre las cuatro comunidades gobernadas por diferentes partidos (CiU, PP y PSOE, respectivamente). 1.300 kilómetros en torno a los cuales vive cerca del 40% de la población española y donde se genera más del 48% del PIB.

Ante un auditorio formado por unos 200 políticos y empresarios, Blanco definió el proyecto como el primero que rompe con la España radial y con la inercia de "500 años de Estado hipercentralizado". Artur Mas, presidente de la Generalitat, se deshizo en elogios y solo avisó a Blanco de que guardará celosamente "el magnífico pen drive" del proyecto para vigilar que se cumple el calendario.

El plan incluye un compromiso presupuestario de 51.300 millones. En realidad, Fomento se apunta en este montante 8.400 millones que ya están ejecutados. De los 42.900 millones restantes, antes de 2020 se invertirán 25.400 millones. Irán destinados a poner a punto los tramos desde Portbou (Girona) a Almería, incluyendo además nudos logísticos y accesos directos con vías férreas hasta los puertos. El resto del dinero comprometido, reservado al largo plazo, estará destinado principalmente a la futura (y no concretada en el tiempo) conexión del corredor con Algeciras, el mayor puerto de España.

Blanco expuso un programa que calificó de "asignatura pendiente" y que supera, sobre el papel, las expectativas más ambiciosas, incluidas las del lobby ferroviario Ferrmed. Desde la frontera francesa hasta Almería, dentro de nueve años el eje ferroviario completo será de velocidad alta. Habrá, como mínimo, una vía de pasajeros y otra de mercancías, con by-passes en las grandes ciudades. En algunos tramos, como entre Barcelona y Tarragona, el trayecto tendrá hasta ocho vías. Todos los puertos del litoral quedarán conectados por ferrocarril y podrán circular por los 1.300 kilómetros trenes de hasta 750 metros de longitud, casi el doble de la media actual.

De Barcelona a Almería, trayecto que ahora se tarda en recorrer más de 12 horas y media, se podrá viajar en poco más de cuatro horas. Según Fomento, en todo el corredor el tráfico de viajeros se multiplicará por 2,5. El de mercancías, se doblará y se evitarán millones de toneladas de emisiones contaminantes del transporte por carretera. Entre los plazos anunciados, la principal novedad ha sido que el tramo entre Castellón y Tarragona se licitará "próximamente" en bloque, lo que permitirá, según Blanco, acelerar su puesta en marcha a 2013, y no a 2014 como se esperaba en algunos tramos.