Hereu dice que ha pecado de modestia en su gestión de Barcelona
En línea con su conferencia del lunes, el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, volvió ayer a sacar pecho hablando de su gestión al frente del Ayuntamiento y reconoció que ha pecado de "excesiva modestia". "La Barcelona que triunfa en todo el mundo es la de Jordi Hereu, la que genera ocupación, la ciudad de mayor calidad de vida de Europa es la del gobierno de Jordi Hereu...", reivindicó en la presentación de su candidatura, que basará en su "gestión del día a día", aunque "sin petulancia".
Todo por Barcelona será el lema de su campaña en unas elecciones primarias en las que el 19 de febrero se medirá con la ex consejera Montserrat Tura. "Quiero seguir siendo el alcalde y vengo a disfrutar del proceso de primarias, a debatir cara a cara con la gente, el terreno en el que más cómodo me siento".
Solo le fallaron el tono y el lenguaje corporal, que traslucía cierto enfado; aunque negó que le duelan las presiones del aparato del Partit dels Socialistes para que abandonara, contrarias como son las encuestas a su candidatura. "No puedo responder por lo que otros han hecho, no sé estar dolido", aseguró, y se mostró convencido de que las primarias serán positivas para "el proyecto progresista de ciudad".
En L'Hospitalet, el candidato que competirá por ser alcaldable del PSC con la alcaldesa Núria Marín, José Conde, denunció ayer "trabas" por parte de la dirección del partido para acceder a la lista de militantes y recoger avales.