Un industrial amigo de Ibarra niega que la Hacienda foral le favoreciese

Un empresario del listado protegido del ex jefe de la Inspección Fiscal de Vizcaya, Juan Ramon Ibarra, aseguró ayer que "nunca" le pidió "trato de favor", pese a que es su amigo desde hace 27 años y fue sometido a una inspección de la Hacienda. "No recuerdo si le dije que estaba en un plan de inspección", afirmó Manuel María Pujana, el dueño de la compañía Lankari, dedicada a la construcción. El empresario afirmó que desconocía las razones de que estuviera en el listado, que según la Fiscalía servía para que los contribuyentes incluidos en ella no fueron investigados y, de hecho, aporta casos concretos de una veintena de empresas y personas a las que se archivaron las inspecciones iniciadas.

El testigo indica que nunca preguntó a Ibarra por su lista, pese a su amistad

Otro empresario de la relación dice que su asesora trató con Ibarra de su deuda

- "¿No le preguntó nunca a Ibarra, con la amistad que tenía, por qué estaba en el listado?", inquirió la fiscal jefe, Carmen Adán.

- "No", respondió el empresario, en la cuarta sesión del juicio contra el máximo responsable de controlar el fraude fiscal en Vizcaya y otros tres funcionarios de Hacienda.

El dueño de Lankari admitió, a preguntas de la fiscal, que vendió una vivienda a Ibarra "hacia el año 1980" y que él se quedó con otra justo al lado de la del principal imputado en esta causa. Pujana aseguró que, tras la inspección de su empresa por parte de Hacienda, "tuvimos que pagar".

No es el único empresario que vendió un piso a Ibarra. José Alejando Larraona, del grupo Arsuaga (que también aparece en el listado protegido), lo hizo en el año 2000 y aseguró desconocer el cargo del acusado. "Se presentó para la venta como Juan Ramón Ibarra y punto. Me enteré de quién era por la prensa". Aseguró que su empresa, una constructor filial de Arsuaga, tuvo una inspección de Hacienda en la década de los 90 pero agregó: "Jamás he recabado trato de favor de Ibarra para mi empresa".

En la sesión de ayer, donde declararon cuatro empresarios incluidos en el listado de presuntos favorecidos por el ex jefe de la Inspección, el propietario de la compañía Biltosan, José Ignacio Negrete, admitió que su asesora realizó gestiones con Ibarra ante los problemas fiscales de la empresa.

- "Pero ella [Miren Aurtenetxe, de la asesoría Macua] dice en su declaración en sede judicial que ustedes también conocían a Ibarra", según expuso la fiscal jefe.

- "Yo no conocía para nada al señor Ibarra. No sé si [mi asesora] habrá declarado eso", respondió el empresario.

La fiscalía señala en su escrito de acusación que Biltosan y otra empresa, Maderas Negrete, dedicadas a la construcción, fueron incluidas en el plan de inspección en 1995, pero "no se practicaron actuaciones inspectoras ni de comprobación, admitiendo el acusado lo que le exponía y le presentaba la asesora". El expediente fue archivado en febrero de 1997 "a petición del acusado".

El empresario relató que en 1997 recibió una citación de Hacienda para una inspección y que en esa época estaba realizando las tareas para "poner las cosas bien". Explicó que años antes tuvo que dejar la gestión de la compañía por una enfermedad y cuando volvió en 1996 se encontró "con un desastre administrativo", por lo que "inmediatamente" empezó a realizar declaraciones complementarias, el mecanismo para ponerse al día con Hacienda en las deudas. Además de las gestiones de la asesora con Ibarra, aseguró que se intentó contactar sin éxito con "un conocido" de su hermano en Hacienda y que sus gestiones eran "para pedir tiempo porque si no, se iba al cierre".