Desliz peyorativo
Hace unos días, tras las primarias en Madrid del PSOE, decía Alfonso Guerra: "La señorita Trini", señalando a la perdedora Trinidad Jiménez, e inmediatamente se abrió la caja de Pandora del machismo en España. Hubo quienes protestaron por el "olor a la Dehesa" que desprendían las palabras del ex vicepresidente del Gobierno, y los que defendían la sociedad moderna en la que estamos instalados.
La guerra de opiniones encontradas sobre el machismo que Guerra ha despertado es algo que los españoles creen tener superado. Como si los genes pudieran cambiar de ideología con tan solo una mirada al espejo.
Son necesarios muchos años de educación, de igualdad en el trato entre mujeres y hombres, de cambiar el vocabulario para lograr que los deslices peyorativos, como el dicho por Alfonso Guerra, desaparezcan de las mentes.