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Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

Sebastian Horsley, artista irreverente

Filmó su propia crucifixión en 2000

Paula Chouza

Apenas una semana antes de fallecer, el artista británico Sebastian Horsley sugirió en The Sunday Times que a sus 47 años, dos tercios de él habían perecido ya. Toda una premonición para un hombre acostumbrado a jugar con la muerte. El jueves 17 de junio fue descubierto sin vida en su apartamento del Soho londinense. Según informó la prensa del país, debido a una sobredosis de heroína. Adicto a las drogas -en 2008 le prohibieron la entrada en EE UU- y al sexo, Horsley será recordado por haber filmado su propia crucifixión en Filipinas en el año 2000.

Fue este el capítulo más histriónico de una carrera poco reconocida. Sin ningún analgésico, el artista quiso clavarse a una cruz en una ceremonia privada para sentir el dolor. Basado en esta experiencia construyó el proyecto Crucifixion lane (Camino de la crucifixión), expuesto dos años después en Londres y que incluía una película, dibujos y fotografías.

Nacido el 8 de agosto de 1962 en Yorkshire del Este, Inglaterra, de padres alcohólicos, Sebastian Horsley contaba a los periodistas que él era producto de un condón roto y un aborto fallido. "Cuando mi madre se enteró de que estaba embarazada se metió una sobredosis. No funcionó. Tampoco nueve meses de bebida excesiva". De su madre decía que "la maternidad no era lo suyo" y a su padre, "lo odiaba". Casados 13 días después de conocerse, terminaron divorciándose en 1975.

Sebastian Horsley estudió en el colegio de Pocklington y después en la escuela de Arte San Martins en Londres, donde se graduó en 1983. Su carrera profesional también estuvo ligada a los medios de comunicación, en los que trabajó como colaborador y en ellos destapó su personalidad. En un artículo de The Observer publicado en 2004, Horsley describía su preferencia por el sexo con prostitutas y alardeaba de haberse acostado con unas mil. Dejó reflexiones tan profundas como: "Puedo contar a mis amantes con los dedos de una mano, si en ella sujeto una calculadora" o "lo que odio de las mujeres en general es la intimidad, la invasión de mi espacio más recóndito, el lento estrangulamiento de mi arte". En el texto confesaba que él también había vendido su cuerpo por dinero en alguna ocasión. Entre 1998 y 2004 escribió sobre sexo en la revista Erotic Review y en 2006 empezó a publicar semanalmente una columna de consejos sexuales en The Observer. Después de cuatro meses y multitud de quejas de los lectores, se quedó sin la sección.

Pero la polémica vida del artista volvió a ser noticia en 2007, con la publicación de su biografía no autorizada, Dandy in the underworld. En ella contaba que a principios de los ochenta había tenido una aventura con el gánster Jimmy Boyle, una relación que él justificó como "fruto de la desesperada búsqueda de una figura paterna". Hace tan solo unos días en Londres se estrenaba la obra de teatro basada en el libro. Vestido con trajes de terciopelo rojo y sombrero de copa, pasó su vida tratando de llamar la atención. Pese a su historial, se casó en 1983 y su matrimonio duró siete años.

Sebastian Horsley.
Sebastian Horsley.REUTERS

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Sobre la firma

Paula Chouza
Periodista de Política en EL PAÍS. Participó en el lanzamiento de EL PAÍS América en México. Trabajó en el Ayuntamiento de A Coruña y fue becaria del Congreso de los Diputados, CRTVG o Cadena SER. Es licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela, Máster en Marketing Político y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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