UGT y CC OO lamentan la poca firmeza del Consell en la financiación autonómica

Los secretarios generales de Comisiones Obreras y UGT del País Valenciano, Francisco Molina y Conrado Hernández, lamentaron ayer la poca firmeza del Consell en la negociación del nuevo sistema de financiación autonómica. Molina, que se declaró "decepcionado" con el Gobierno central, manifestó que el Consell tendría que haber sido "más firme en lo que son las voluntades y necesidades propias que tenemos los valencianos y no ir al rebufo en función de lo que pedían otros". El dirigente de UGT recalcó que "algunos sabían lo que pedían y otros pedían en función de por donde soplaba el viento".

Las críticas al nuevo modelo de financiación fueron unánimes, aunque las responsabilidades se repartieron en función de quién realizó el análisis.

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Para el secretario general del PP, Ricardo Costa, el único culpable del mal resultado obtenido por los valencianos es el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que en su opinión vuelve a castigar a la Comunidad Valenciana. "Esto [el nuevo modelo] no es más que un chanchullo político de Zapatero con Esquerra Republicana. Es una chapuza política".

Para Jorge Alarte, secretario general del PSPV, el nuevo sistema es positivo porque prevé un fondo específico de competitividad que permitirá a la Comunidad Valenciana llegar de manera progresiva y como mínimo a la media de financiación per cápita gracias a aportaciones adicionales. Alarte lamentó el papel del Consell en la negociación. "Se ha limitado a un victimismo absurdo y debería haber dicho más acerca del fondo de competitividad, del bilingüismo, de los mecanismos de actualización según la población y de fórmulas correctoras del aumento de residentes debido al turismo".

El secretario general del Bloc, Enric Morera, pidió al Consell que movilice a la sociedad para intentar recomponer un poco la situación y lamentó que el Gobierno se haya aprovechado de la debilidad del Consell para cuadrar los números del sistema. Marga Sanz, de Esquerra Unida, indicó que el Consell no tiene capacidad negociadora porque está más pendiente de los tribunales.