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Entrevista:FRANCESC JOSÉ MARÍA | Director gerente del Instituto Catalán de la Salud

"No ha sido un año horrible para la sanidad catalana"

Ana Pantaleoni

Tres cuartos de hora después de que se declarara el incendio, el gerente del Instituto Catalán de la Salud (ICS) Francesc José María ya estaba en Can Ruti para participar en el comité de crisis. No era el primero del año. El incendio de Vall d'Hebron del pasado septiembre, que provocó cortes de luz, también tuvo su comité. Y también estuvo José María. Ambos centros forman parte de la red del Instituto Catalán de la Salud (ICS), organismo que gestiona 450 ambulatorios, 8 hospitales y 39.000 trabajadores. José María asumió el cargo hace ahora un año.

Pregunta. ¿Ha sido un año horrible para la sanidad catalana?

Respuesta. No. Ha sido un año en el que hemos tenido una serie de incidencias que no deberían haber pasado, como los dos incendios. Otras cuestiones derivadas de una mala praxis profesional, como sucedió en el caso del accidente en la transfusión en el hospital de Bellvitge y la infección de la hepatitis C en Vall d'Hebron, están dentro de las incidencias, no diré normales, porque no lo son, pero sí que se producen habitualmente en el funcionamiento de cualquier centro hospitalario. Hacemos millones de asistencias al año y de vez en cuando se produce una mala praxis que el sistema tiene obligación de reparar.

"La instalación eléctrica es buena, pero podría estar mejor protegida"
"El sistema sanitario público no puede objetar en la cuestión del aborto"
"Construir un nuevo hospital en Vall d'Hebron no es un brindis al sol"
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P. Otros episodios desgraciados han sido los incendios de Vall d'Hebron y Can Ruti. ¿Son viejos los hospitales del ICS?

R. La edad los delata. Hemos celebrado el 40º aniversario del Joan XXIII, Can Ruti cumplirá 25 años, Vall d'Hebron tiene 52...

P. Viejos, pero es lo que tenemos.

R. Cuando no hay otra op-ción, se construye uno nuevo como es el caso del Trueta. En Bellvitge también estamos construyendo un hospital por fases.

P. ¿Y Vall d'Hebron?

R. Se ha hecho una primera reunión con el Ayuntamiento, el Catsalut, el ICS, los jefes de servicio, el gerente y GISA sobre las posibilidades de un nuevo hospital. Se ha descartado que se haga fuera de su recinto actual por falta de espacio. Suponía irse a la Zona Franca. Se van a realizar tres estudios de opciones diferentes dentro del recinto. GISA nos tiene que presentar los estudios a finales de enero. Estaríamos hablando del hospital del siglo XXI de Barcelona, aunque con una perspectiva de 10 años en el mejor de los casos. Hay que tener en cuenta que ya se está invirtiendo en obras y todavía están por adjudicar 81 millones. Muchas de estas obras se tendrán que continuar haciendo. Construir el nuevo hospital no es un brindis al sol, se está discutiendo seriamente.

P. Hablamos de un nuevo hospital en un año de presupuesto ajustado.

R. Hay muchas fórmulas. Por ejemplo, Esperanza Aguirre ha construido ocho hospitales públicos con formas de asociación público-privada. Estamos hablando de la gran infraestructura sanitaria de Cataluña y hay muchas formas de financiación.

P. Can Ruti sí contaba con las licencias, pero ¿estaban actualizadas las medidas antiincendios?

R. Tenemos el plan de protección aprobado por una comisión con la participación de los bomberos y está en vigor desde el 1 de enero de 2007. Trabajamos permanentemente para actualizar estas normas.

P. Si todo está actualizado, ¿cómo se explica que el humo llegara tan lejos en Can Ruti?

R. Teníamos sectorización en cada planta con material resistente al fuego durante 60 minutos. El fuego quemó el plástico de los cables y el humo subió por el patinejo. Los bomberos tardaron más tiempo en actuar porque no podíamos hacer un cero energético. El comité de crisis decidió no apagar la luz, teníamos gente en los quirófanos. Decidimos esperar a sacar a los pacientes del quirófano, se estaban haciendo operaciones de corazón. A los 60 minutos acabó la sectorización y el humo pasó por todos sitios.

P. ¿Cree que el plan funcionó?

R. Con un incendio así, todo el personal trabajando, familias, visitas, consultas externas... 3.000 personas. Nadie se intoxicó y no hubo accidentes (excepto un bombero que se rompió una pierna). Teníamos las medidas antiincendio, funcionaron, y los que se atreven a opinar sin haber estado en Can Ruti son unos atrevidos.

P. A raíz del incendio de Vall d'Hebron se anunció una auditoria eléctrica de todos los hospitales del ICS.

R. Está hecha con fecha del 10 de diciembre. Hemos detectado 10 puntos en los cuales hemos de incidir de forma inmediata. No significa que todos los hospitales y los centros de primaria lo necesiten. El decálogo establece una tabla de acciones a corto plazo para incrementar la seguridad. Las instalaciones eléctricas están bien, lo que no está tan bien es la ubicación física de las centrales eléctricas. Excepto Vall d'Hebron, todos los edificios tienen la central dentro. Es un problema estructural difícilmente solucionable. Hemos detectado que se ha de mejorar la sectorización de locales de riesgo, incrementar los extintores portátiles de gran capacidad, revisar los detectores y alarmas de humos y fuego. Tenemos una buena instalación eléctrica, pero podría estar mejor protegida.

P. Entonces, ¿no todo está tan bien?

R. Todo está dentro de la normativa, pero todo es mejorable. Aplicaremos las mejoras en el primer trimestre de 2008.

P. ¿Es partidario de crear en los hospitales públicos unidades para abortar?

R. Estoy a favor de que la interrupción voluntaria del embarazo, que forma parte de la cartera de servicios públicos, sea tratada como cualquier otro. En los servicios de ginecología y obstetricia de los hospitales se tendría que poder prestar este servicio. Tenemos algunos centros donde los profesionales han objetado, como en las comarcas del Ebro y el Camp de Tarragona. Los profesionales pueden hacer objeción de conciencia, pero el sistema sanitario público no. Francesc José María estaría de acuerdo en una reforma de la ley y en que se introdujera el supuesto de los plazos.

P. ¿Cómo lleva la ampliación del horario de los ambulatorios?

R. Es una cuestión en moratoria. Como dice el acuerdo de la mesa sectorial, se debe plantear en los centros a través del debate del reglamento de régimen interior. Tienen seis meses para debatirlo. En estos momentos, lo prioritario es que los profesionales, y no sólo los médicos, acepten el reto de lo que debería ser la autoorganización de los centros. La ley del ICS nos lo permite y tenemos que explorar la autogestión. Y ver cómo acomodamos la creciente demanda asistencial y las necesidades de nuestros profesionales.

P. ¿Qué hará para acabar con esta presión?

R. Por ejemplo, en 2008 aplicaremos un plan de refuerzo de los 25 o 30 centros de atención primaria con más carga de trabajo.

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Sobre la firma

Ana Pantaleoni
Redactora jefa de EL PAÍS en Barcelona y responsable de la edición en catalán del diario. Ha escrito sobre salud, gastronomía, moda y tecnología y trabajó durante una década en el suplemento tecnológico Ciberpaís. Licenciada en Humanidades, máster de EL PAÍS, PDD en la escuela de negocios Iese y profesora de periodismo en la Pompeu Fabra.

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