Rajoy desprecia el cambio climático y Gore ataca a la derecha escéptica

Mariano Rajoy se enfrentó ayer a la ciencia. En contra del consenso científico mundial, que considera el cambio climático producido por el hombre como una de las mayores amenazas contra la humanidad, Rajoy negó que se trate de un problema mundial. Y lo hizo basándose en un primo suyo catedrático de Física y confundiendo clima y tiempo, conceptos elementales.

"Hay muchos debates y opiniones muy encontradas sobre el cambio climático. Yo sé poco de este asunto, pero mi primo supongo que sabrá. Y entonces dijo: 'He traído aquí a diez de los más importantes científicos del mundo y ninguno me ha garantizado el tiempo que hará mañana en Sevilla. ¿Cómo alguien puede decir lo que va a pasar en el mundo dentro de 300 años?", replicó Rajoy cuando fue preguntado por sorpresa por una de las asistentes al Congreso del Instituto de la Empresa Familiar, que se celebra en Mallorca.

A continuación, Rajoy remachó que el calentamiento global no podía transformarse en "el gran problema mundial" y citó otros temas "más importantes como los del sector energético, emisiones de CO2 y otros". La prueba del desconocimiento de Rajoy es que las emisiones de CO2 son precisamente la causa del cambio climático, según el consenso científico.

Sólo unas horas después y en el mismo auditorio, Al Gore pareció dar respuesta a Rajoy. No le citó, pero atacó a "los ideólogos de la derecha de detener cualquier iniciativa que se tome desde el Gobierno" en contra del cambio climático. El ex vicepresidente de EE UU prohibió la presencia de periodistas en el auditorio, aunque algunos asistentes relataron que, en el turno de preguntas, resaltó ese problema como uno de los frentes de oposición que tiene para desarrollar su mensaje.

También el rey Juan Carlos situó ayer mismo el terrorismo y el cambio climático entre los "grandes desafíos" que "requieren del fortalecimiento de la cooperación a escala internacional", en un discurso pronunciado en la cena ofrecida con motivo de la visita de Estado del presidente de Eslovaquia, Ivan Gasparovic.

Rajoy, con sus declaraciones, ha pasado por la derecha al presidente de EE UU, George W. Bush, que llegó a la presidencia en 2001 negando el calentamiento y moderó su discurso cuando la Academia de Ciencias de EE UU, a petición de la Casa Blanca, ratificó la existencia del calentamiento producido por el hombre. Rajoy transita ahora un camino que Bush dejó hace seis años y se aleja de los líderes de la derecha europea como Merkel o Sarkozy, que aplaudieron al Premio Nobel de Gore y alertan del peligro del calentamiento.

Además, Rajoy desautoriza a su partido y en especial a su director de campaña, Juan Costa, que ha afirmado que el cambio climático es uno de los mayores problemas a los que se enfrenta el planeta. Costa, atacado por la Cope por defender esta postura, ha insistido y ha mostrado en televisión como gran libro La venganza de la Tierra, uno de los más catastrofistas. En innumerables ocasiones, el PP ha denunciado la gravedad del cambio climático -en Valencia y Murcia acusan al Gobierno de fomentarlo con las desaladoras- y Nuevas Generaciones le pidió a Rajoy el liderazgo europeo en la materia.

El propio Rajoy creó el 25 de abril de 2007 una "comisión de expertos independientes del PP para el cambio climático". Entre ellos está Luis Balairón, del Instituto Nacional de Meteorología: "Rajoy confunde el clima y el tiempo y eso es una metedura de pata. Una cosa es que no se pueda predecir cómo irá en la bolsa un valor al día siguiente y otra, que no se puedan hacer predicciones fiables sobre la evolución de la economía". En aquella presentación, según el comunicado del PP, Rajoy sostuvo: "El cambio climático es el gran desafío global del conjunto del planeta en el siglo XXI y requiere una respuesta colectiva de la comunidad internacional". Parece que no había hablado con su primo.