El Ayuntamiento de Málaga cobrará 106 millones de euros por dos recalificaciones
La oposición censura la firma de tres convenios a un mes del nuevo plan urbanístico
La Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) de Málaga dará luz verde hoy a tres convenios urbanísticos para la recalificación de los suelos industriales de la antigua Repsol, de Telefónica y de la fábrica de Confecciones Sur, en los que se podrán construir un total de 2.400 viviendas, de las que 641 serán de VPO. Sólo los dos primeros reportarán a las arcas municipales unos ingresos de 106,5 millones de euros. La oposición critica que se introduzcan cambios en el vigente PGOU cuando en apenas un mes está prevista a la aprobación inicial del nuevo planeamiento.
La oposición considera esta operación una prueba de que el equipo de Gobierno de Francisco de la Torre (PP) ha optado por un urbanismo a la carta al servicio del mejor postor y con fines meramente recaudatorios.
La Ley de Medidas de Vivienda Protegida y Suelo, aprobada el pasado diciembre, impide a los ayuntamientos disponer del dinero que obtengan por convenios urbanísticos hasta que esté aprobado definitivamente el plan de desarrollo urbanístico. Y la modificación de elemento del plan anterior implica un procedimiento más rápido que el de la aprobación del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), motivo por el que el Ayuntamiento ha optado por dicha fórmula, "ilógica" para la oposición cuando se está a punto de aprobar el nuevo planeamiento.
Los convenios de Repsol y Citesa han avivado el debate sobre la construcción en altura en una ciudad en la que, salvo en la zona de Malagueta, no se han construido grandes bloques y en la que estos proyectos incluyen cinco edificios de 20 o más plantas además de un rascacielos de 40 pisos que será el más alto de Málaga.
En el caso del convenio con la promotora Comarex para el desarrollo de los terrenos que ocupaban los antiguos depósitos de Repsol firmado el pasado 21 de marzo, se contempla la entrega de nueve millones de euros a los 30 días de la aprobación inicial de la modificación de elemento al PGOU, que se hará en el pleno del día 29.
En los terrenos de Repsol, el PGOU vigente ya concedía un uso residencial, pero el convenio con Comarex supone multiplicar por tres la edificabilidad permitida ahora para un ambicioso proyecto urbanístico, que incluye el que será edificio más alto de la ciudad (una torre de 160 metros de altura con 40 plantas) en una zona de la ciudad muy revalorizada por el soterramiento de las vías del tren, que ahora dividen la parcela, muy próxima al mar y a la nueva estación del AVE. Por este convenio, el Ayuntamiento ingresará 83,3 millones de euros.
Rascacielos de 40 plantas
Los suelos de Repsol tenían asignado un techo edificable de 61.000 metros cuadrados, que con la recalificación pasan a 177.000. La construcción en altura -están previstos cuatro grandes edificios- permitirá dejar una zona de parque de 80.000 metros cuadrados, en una de cuyas esquinas se ubicará un bloque circular con 399 viviendas de VPO: Las 933 viviendas libres previstas irán repartidas entre el citado rascacielos de 40 plantas y otros tres bloques de 25, 26 y 28 pisos, en los que habrá usos comerciales.
La ordenación de los terrenos de la antigua Citesa, propiedad de la compañía Telefónica, también incluye tres grandes edificios de 20 plantas con un total de 674 viviendas, de las que 202 serán de VPO y el resto libres. Por este convenio, el Ayuntamiento ingresará 23,2 millones. La edificabilidad prevista es algo superior a la que aparecía inicialmente en el documento de avance del nuevo PGOU -dos plantas más en cada uno de los tres edificios-. La nueva ordenación de la zona prevé que el terreno de la avenida de Martiricos, al otro lado de la antigua fábrica de teléfonos, donde ahora se ubica el mercadillo de los domingos, sea convertido en zona verde.
Otro suelo que perderá su condición de industrial para convertirse en residencial será el de la fábrica de Confecciones Sur. Apenas un mes después de que la dirección del grupo Cortefiel y los 40 trabajadores llegaran a un acuerdo para el cierre de la última fábrica de ropa que a esta sociedad le quedaba en España, el Ayuntamiento de Málaga va a autorizar la recalificación de la planta y de otras dos parcelas colindantes que suman un total de 238.835 metros cuadrados. El nuevo plan de ordenación de esta zona contempla la construcción de 400 viviendas, de las que 40 serán de VPO.
Además de estos polémicos convenios, la comisión de Urbanismo también verá hoy el expediente de recalificación de la finca Dos Hermanas, en Churriana, que el actual PGOU contemplaba como reserva de suelo no urbanizable. Con la modificación a urbanizable, el Ayuntamiento intenta dar una solución a unas 80 familias afectadas por las expropiaciones para la ampliación del aeropuerto, ya que se les permitirá construir viviendas de VPO. La finca dispone de un total de 105.241 metros cuadrados, con un techo máximo edificable de 34.203 metros cuadrados. La mitad de ellos serán para VPO y el resto, viviendas libres y uso comercial.
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