"Yo patino en casi todo"

Pregunta. ¿Qué hace una arquitecta colgada de la red?

Respuesta. Habrá otros arquitectos colgados de un árbol. La red, desde luego, es una buena infraestructura llena de apoyos.

P. ¿La red es lo único de lo que está colgada?

R. Estoy colgada también de los míos: de mi familia, de mis hijos y de mi pasión, que tiene nombre y apellidos.

P. Dice que su carrera es como un sacerdocio. ¿Qué ha llegado, a cardenal?

R. Arquitectura imprime carácter o deja su impronta. No puedes estar en una ciudad, en un edificio o ver un cuadro desligándote de ese bagaje.

P. Y en Google es la Cañizares de los buscadores, la primada de España.

R. Yo generalmente me considero iconoclasta.

P. ¿En qué se parece a un ordenador?

R. En que tengo mucha información, no siempre en el orden adecuado; pero si buscas con la herramienta en forma, al final la encuentras.

P. ¿Es usted todo software?

R. Todo lo contrario. Soy muy de carne y hueso.

P. "Google es la empresa más atractiva del siglo XXI". ¿La publicidad se la pagan aparte?

R. No; es parte de mi sueldo.

P. ¿Y tengo que creerme que le diría que no a Bill Gates?

R. Microsoft ha sido una empresa muy interesante del siglo XX. Pero, hoy por hoy, el proyecto de Google, sus productos y su potencialidad la hacen una empresa mucho más atractiva. De hecho, el 97% de los internautas españoles lo piensa.

P. ¿Cómo anda de cerebro? ¿Le salen los sudokus?

R. Los sudokus, sí, pero porque creo que no son un tema de cerebro, sino de método. De cerebro, nunca se tiene bastante [ríe]. Me gustaría tener más.

P. ¿Se mueve mejor en el mundo virtual o en el real?

R. En el real, sin duda. Antes que navegar con un ordenador prefiero navegar en el mar; y antes que chatear prefiero una charla con un amigo.

P. ¿En Google se encuentra todo?

R. Todo lo que es información, sea cual sea el soporte.

P. Entonces me podrá buscar el teléfono de Harrison Ford o el de Dominique de Villepin.

R. Le puedo buscar la página, a ver si ponen el teléfono.

P. ¿Y usted qué teléfono ha buscado?

R. Pues de George Clooney no el teléfono, pero confieso que sí las fotos.

P. No soporta un cuadro torcido. ¿A usted qué se le tuerce?

R. La mentira. Es una cosa que no soporto.

P. ¿Va de mariperfecta?

R. Uy, en absoluto. Nunca has leído todos los libros que querrías, ni sabes de todo lo que te interesa. Me gustaría tener algún don especial para tocar un instrumento, o para cantar o bailar. Algo creativo.

P. ¿Tiene una gracia andaluza que no se puede aguantar?

R. En absoluto. Vaya preguntas que hace. Soy extrovertida. Y quiero pensar que divertida.

P. Está contra la política de cuotas.

R. En la empresa privada, sí. Reconozco que la Ley de Igualdad tiene buena intención. Pero las políticas de igualdad se deben promocionar desde la sociedad, desde la educación.

P. Pongamos que Google le paga un lifting. ¿Dónde se lo haría?

R. A veces, en el alma. Me quitaría las huellas, las heridas que te han ido dejando. Porque, al final, las arrugas externas a veces embellecen.

P. En Dell puso patines a los empleados. ¿Usted en qué patina?

R. Pues hija mía, yo patino en casi todo. Siempre piensas que podrías haberlo hecho mejor.

P. ¿Sus saltos en paracaídas la han ayudado en el mundo laboral?

R. Todo ayuda: asumir riesgos, buscar tus límites. Tener actividades fuera del trabajo fomenta la creatividad. Yo lo disfruté.

P. Tiene fama de coquetuela.

R. Más que coqueta, yo a lo que no renuncio es a ser femenina. No me pinto, porque soy alérgica, y vistiendo mezclo cosas de marca con otras de trapillo.

P. Dicen que habla más que el ministro de Justicia.

R. Todo depende. Me gusta comunicar. Es lo que nos diferencia de otros animales. Se comunica con la palabra, con la mirada, con los gestos.

P. ¿Hay algo en la vida en lo que no haya competido?

R. Yo creo que todos competimos, contra nosotros mismos y contra el tiempo. Pero al final siempre nos gana. Yo compito cuando merece la pena. Cuando realmente me importa.