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Análisis:
Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

Reaparece el tripartito

Blanca Cia

Xavier Casas (PSC), Imma Mayol (ICV) y Jordi Portabella (ERC) comparecieron ayer al alimón para explicar la nueva propuesta de Can Ricart. Puede parecer poco extraordinario ya que son socios en el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Barcelona. Sin embargo, hace tiempo que los encuentros a tres bandas no se prodigaban. El porqué hay que buscarlo en la falta de acuerdo entre los tres socios en algunos asuntos y en el distanciamiento que se ha producido entre ellos de una forma más acentuada desde hace unos meses.

Hubo foto del tripartito en la presentación de la nueva división de los barrios de Barcelona en diciembre de 2004. También se inmortalizaron en mayo de 2005, en el ecuador del mandato. Después, algunas de las llamadas fotos de familia de las cuestiones más importantes del Ayuntamiento han tenido protagonistas cambiantes. Por ejemplo, cuando la Carta Municipal fue aprobada definitivamente se sumó a la foto Xavier Trias, presidente del grupo municipal de Convergència i Unió, que también refrendó la Carta después de su paso por el Congreso de los Diputados. Ese cuatripartito volvió a escenificarse en la firma del plan de drogas del consistorio, en el otoño pasado. La imagen de acuerdo entre los tres socios de gobierno se quebró de forma diáfana en la aprobación de la nueva ordenanza de la ciudad. En esa hipotética foto -porque no se hizo-hubiera estado presente Trias (CiU) y, sin embargo, no habría aparecido Mayol (ICV) porque votó en contra. Esa falta de acuerdo entre los tres socios en una cuestión de importancia de la ciudad generó más tensiones -a veces más que eso- entre los tres partidos. Finalmente, no llegó la sangre al río y tras el periodo de reflexión que anunció el alcalde no pasó nada.

El último episodio de desencuentro en el tripartito municipal ha tenido como protagonista los resultados del último barómetro municipal, que reflejaba cierta mejoría de la salud política del alcalde, Joan Clos, pero sobre todo inclinaba la balanza hacia una recuperación de intención de voto del PSC frente a una caída sensible de ICV. Esos resultados fueron criticados por la oposición y parecidas críticas -hablaban de resultados sesgados- se hicieron desde la propia Iniciativa per Catalunya. Es decir, que un socio del gobierno no se creía los resultados de una encuesta que realiza su propia Administración. El partido en el que Mayol es una destacada dirigente volvió a hacer parecidas acusaciones el pasado lunes.

Por todas esas circunstancias y por el hecho de que a un año vista de las elecciones municipales cada partido barre para su casa, la foto de familia de ayer era, si cabe, más llamativa. O una forma de comprometer a los dos socios de ERC e ICV en un asunto, el de Can Ricart, que ha sido llevado bajo batuta socialista.

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Sobre la firma

Blanca Cia
Redactora de la edición de EL PAÍS de Cataluña, en la que ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en diferentes secciones, entre ellas información judicial, local, cultural y política. Licenciada en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona.

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